Ansiedad por separación: Claves para tratarla a tiempo
¿Cuáles son las causas y la solución por la ansiedad por separación en los niños? ¿Crees que tus hijos la están sufriendo? Encuentra las claves para poder tratarla a tiempo.
El miedo es una emoción presente desde que nacemos. Según algunos autores, los primeros miedos en los niños aparecen alrededor de los 6 meses de vida: el miedo a los extraños, a los ruidos fuertes y a los sitios altos; y junto a ellos, el miedo a separarse de sus figuras de apego.
¿Qué es la ansiedad por separación?
La ansiedad por separación forma parte de una etapa del desarrollo evolutivo normal de un niño. Aproximadamente un 40% de la población infantil experimenta este proceso, que suele durar hasta los dos años de edad, cuando el niño empieza a comprender que aunque no vea a sus padres en ese momento, ellos volverán más tarde.
Esta respuesta de ansiedad en niños tiene valor adaptativo, en este caso, el niño quiere tener garantías de que los padres se mantengan cerca y le presten la atención necesaria. Sólo en algunos casos, cuando esta ansiedad se manifiesta de forma muy intensa, se mantiene en el tiempo y presenta determinadas características, podríamos valorar la presencia de un Trastorno de Ansiedad por Separación (TAS).
Síntomas del Trastorno de Ansiedad por Separación
El Trastorno de Ansiedad por Separación es el trastorno de ansiedad más frecuente durante la infancia y la adolescencia, siendo la edad media de aparición los 7 años, aunque puede presentarse también en la etapa preescolar. Como cualquier respuesta de ansiedad sus síntomas se manifiestan a nivel cognitivo, fisiológico y conductual.
1. Síntomas cognitivos
Entre los síntomas cognitivos, es decir la interpretación que el pequeño realiza de la situación, se encuentran:
- Preocupación y malestar excesivo del niño cuando piensa que va a ocurrir o vive una separación de los padres.
- Preocupación persistente y miedo de que las figuras de apego puedan sufrir algún daño y por lo tanto exista una pérdida de las mismas. Incluso en estos casos los niños pueden experimentar una angustia de separación.
- Preocupación excesiva y persistente por la posibilidad de que se produzca algún acontecimiento negativo que lo separe de sus figuras de apego (perderse, ser raptado, etc).
2. Síntomas fisiológicos
Los síntomas fisiológicos se refieren al conjunto de señales físicas que acompañan a la ansiedad por separación. En muchas ocasiones estos síntomas de la ansiedad en niños pueden ser confundidos como característicos de otro problema. Es habitual que estos niños presenten:
- Quejas repetidas de síntomas físicos cuando se produce o piensan que va a tener lugar la separación de sus figuras de apego. Entre los más frecuentes están el dolor de cabeza, de estómago, náuseas o vómitos.
- Pesadillas repetidas basadas en la separación de sus padres.
3. Síntomas conductuales
Con respecto a los síntomas conductuales encontramos:
- Miedo excesivo y resistencia a estar solo o sin las figuras de mayor apego en casa o en otros lugares. Además este síntoma puede expresarse también a través de la angustia por separación.
- Rechazo persistente o resistencia a salir lejos de casa por miedo a la separación.
- Rechazo persistente o resistente a dormir fuera de casa o hacerlo sin tener cerca una figura de apego.
Además, para confirmar la sospecha de este problema, estos síntomas de la ansiedad por separación tienen que estar presentes al menos durante cuatro semanas; y suponer un deterioro muy significativo en las relaciones sociales y en el ámbito académico del niño.
¿Cómo tratar la ansiedad por separación?
En primer lugar es fundamental señalar que para realizar un diagnóstico de Trastorno de Ansiedad por Separación, es necesaria la valoración por un profesional experto, que realizará distintas pruebas como entrevistas, cuestionarios y autoinformes tanto al niño como a sus padres, con el fin de obtener la información más completa, necesaria para realizar un adecuado estudio de cada caso. Este profesional además, deberá descartar problemas similares o relacionados como la agorafobia; el trastorno de ansiedad generalizada o un trastorno del espectro autista.
La fase educativa a los padres es fundamental, ya que en muchas de estas ocasiones en las que aparece la ansiedad, la refuerzan o castigan de forma inadecuada, haciendo que se perpetúe el problema, sin tener intención ni ser conscientes de ello. Por ello, es necesario evaluar con detalle los antecedentes y consecuentes de la ocurrencia de ansiedad por separación.
Resulta muy útil enseñar a los niños alguna técnica de relajación, adecuadas a su edad, que los padres pueden utilizar con ellos para reducir los síntomas fisiológicos de la ansiedad. El pilar fundamental del tratamiento consiste en la exposición gradual del niño a las situaciones de separación temidas, empezando por las que menor ansiedad le genere. El objetivo es promover conductas independientes en el niño y actividades que suponen la separación de sus figuras de apego.
Causas del trastorno de ansiedad por separación
Existen diversas causas para que el niño pueda sufrir de este trastorno. Aun así, todos los pequeños tienen la probabilidad de sufrirlo a pesar de su ambiente o el estilo educativo con el que se desarrollan.
- Estrés familiar: Cuando existe un ambiente dónde hay un malestar familiar contante, o se vive la pérdida de un ser querido, muchos niños pueden desencadenar estos malos momentos en un trastorno de ansiedad por separación.
- Personalidad: Existen algunos factores temperamentales que pueden hacer que los niños sean más propensos a tener esta ansiedad por separación.
- Antecedentes familiares: Cuando en la familia hay casos de ansiedad o se vive en un entorno donde los padres sufren de ella, puede hacer que los niños tengan más posibilidades de tener una angustia por separación.
¿Cómo Ayudar a un niño con trastorno de ansiedad por separación?
A ningún padre le gusta verse en la situación en la que sus hijos experimentan ansiedad por separación. Por suerte existen formas de evitar estos ataques de ansiedad en los niños.
- Dejar de evitar las situaciones de separación: En estos casos el primer paso que acostumbran a hacer los padres es evitar las situaciones de separación con los niños. Este es uno de los errores más comunes de los padres.
- Ambiente comprensivo: La mejor forma para combatir la ansiedad por separación es intentar crear un ambiente compresivo para que los niños se sientan más cómodos. A través de la empatía se puede mejorar cualquiera de las etapas de la ansiedad por separación.
- Mantenerse informados: Para tratar de combatir la ansiedad de separación lo esencial es informarse de forma adecuada. La mejor manera de enfrentarse a esta enfermedad infantil es a través de saber cómo ha surgido.
- Escucharlos: Cuando los niños experimentan la angustia de separación una de las técnicas más efectivas será escuchar y respetar los sentimientos de los hijos. La atención de los padres en estos casos puede ser más que curativa.
- Hablar sobre el problema: Los niños no entienden el por qué se produce la separación de los padres. Por este motivo, es esencial hablar sobre ello e intentar hacerle comprender la normalidad de la situación.
- Preparar la separación: Muchas veces los niños experimentan la ansiedad por separación cuando están en la escuela o en sus actividades extraescolares. Por ello, una buena forma de combatir esta angustia de separación es intentar preparar el terreno o crear estrategias para que se sienta más cómodo en esta situación.
- Mantén la calma: En algunas ocasiones los padres pierden los nervios ante la ansiedad por separación que experimentan los niños. Para conseguir que los pequeños se sientan más cómodos la clave es intentar mantener la calma ante estos momentos.
- Incítalo a hacer actividades: Apoyar a los niños a participar en actividades distintas y fuera del entorno familiar es una manera ideal de evitar estas crisis de ansiedad en niños.
- Elogia su progreso: Una manera ideal de intentar eliminar la ansiedad por separación es a través de verbalizar los esfuerzos y las mejoras de los niños.
- Consulta con un psicólogo: Cuando esta situación acaba derivando en un problema más que frecuente, es necesario la participación y la consulta con un psicólogo infantil. La razón es que este trastorno de ansiedad por separación puede llegar a afectar en diversas etapas de su desarrollo.
Conseguir que los niños crezcan en el mejor ambiente es una manera ideal de lograr que los pequeños desarrollen sus mejores capacidades y virtudes. Un buen entorno familiar es la clave para que los niños puedan ser la persona que ellos deseen ser.
Las informaciones publicadas por MundoPsicologos no sustituyen en ningún caso la relación entre el paciente y su psicólogo. MundoPsicologos no hace la apología de ningún tratamiento específico, producto comercial o servicio.
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