¿Por qué lloro cuando discuto? 6 Motivos y cómo lidiar con esta situación

¿Qué podemos hacer para afrontar las emociones difíciles cuando discutimos? ¿Por qué podemos acabar llorando en una discusión? Descubre los motivos y cómo afrontarlo.

10 JUL 2024 · Última modificación: 16 JUL 2024 · Lectura: min.
¿Por qué lloro cuando discuto? 6 Motivos y cómo lidiar con esta situación

Existen situaciones que pueden llevarnos hasta nuestro límite. En estos casos, algunas personas pueden llegar a no ser capaces de controlar el llanto debido a que se trata de una manera de lidiar con estas emociones o sentimientos difíciles. Por ejemplo, podemos llegar a llorar cuando discutimos debido a que nuestro cuerpo busca intentar equilibrar las emociones que estamos experimentando y nos están afectando. Pero, ¿cuáles son los motivos por los que esto sucede?

¿Por qué lloro cuando discuto?

Llorar cuando se discute es una situación más común de lo que pensamos. De hecho, esto sucede debido a una combinación de desencadenantes tanto emocionales como fisiológicos. Principalmente, esta reacción es debido a que nuestro cuerpo libera adrenalina cuando experimentamos demasiada ira, lo que puede hacernos más sensibles de lo normal. Además, la ira suele causar impotencia y frustración, lo que puede estar muy vinculado a una respuesta emocional intensa. Teniendo en cuenta esto, algunos de los motivos que pueden ser la razón más común por la que lloramos cuando discutimos son los siguientes:

  1. Desbordamiento emocional: La ira reprimida puede acabar causando un desbordamiento emocional. En muchos casos, cuando llegamos a discutirnos con los demás esto es debido a que llevamos mucho tiempo no diciendo lo que realmente pensamos o no comunicándonos con los demás. Por lo que, en estos casos, cuando nos vemos abrumados por una emoción muy fuerte esto puede dar lugar al llanto.
  2. Frustración e impotencia: A veces, llorar puede ser debido a que sentimos impotencia por no tener un control ante una situación concreta. La impotencia, también es una emoción que puede llegar a desencadenar llorar ante una discusión.
  3. Autorregulación: Fisiológicamente, llorar es una de las maneras que tiene nuestro cuerpo de conseguir relajarse. Ante una discusión, podemos experimentar demasiada tensión, lo que puede conllevar que acabemos llorando para liberarla y conseguir relajarnos.
  4. Empatía: Puedes llorar en una discusión debido a que sientes empatía ante la otra persona y no sabes cómo apoyarla.
  5. Mecanismo de afrontamiento: Llorar en una discusión también puede actuar como un mecanismo de afrontamiento, ya que indica tanto a uno mismo como a los demás que uno tiene necesidades emocionales que no están siendo satisfechas. Es decir, se trata de una respuesta que tiene nuestro cuerpo para procesar ciertas emociones muy intensas.
  6. Depresión y ansiedad: Trastornos como la depresión y la ansiedad hacen que las personas acaben tendiendo a emociones más extremas, lo que puede conducir a que, ante discusiones, acaben llorando debido a ello.

Debes tener en cuenta que llorar cuando estás enfadado, frustrado o decepcionado con otra persona es una reacción completamente común y natural. Por lo que, ante esta reacción es importante no juzgarse por ello.

¿Cómo afrontar las ganas de llorar cuando estás discutiendo?

¿Cómo afrontar las ganas de llorar cuando estás discutiendo?

Algunas de las estrategias que pueden ayudarte a lidiar con las ganas de llorar cuando estás discutiendo son las siguientes:

  • Usa técnicas de respiración: La respiración profunda se trata de una herramienta muy eficaz para evitar las lágrimas cuando estás viendo que tus emociones te están desbordando. Al usar tu respiración, podrás lidiar con la tensión o todas las respuestas fisiológicas que pueden llevarte a llorar.
  • Toma un descanso: Si ves que durante una discusión tus emociones te desbordan, puede serte de ayuda tomar un pequeño descanso para retomar la conversación más adelante. Al realizar una pausa, podrás ordenar tus pensamientos así como relajarte física y mentalmente.
  • Prueba la distracción consciente: Redirecciona tu atención hacia un pensamiento que te ayude a frenar tus emociones negativas. Al enfocar tu atención en algo que pueda ayudarte a lidiar con estos sentimientos, te permitirá frenar las ganas de llorar.
  • Practica una comunicación asertiva: En lugar de comunicarte con agresividad o reprimir tus emociones, la comunicación asertiva implica mantener el control de tus sentimientos y sobre todo ser más objetivo con aquello que estás explicando. Por ejemplo, en lugar de definir lo que sientes como la verdad, intenta expresar que es así como te has sentido o lo has visto desde tu perspectiva.
  • Comunica tus sentimientos: Una manera eficaz de acabar con emociones demasiado potentes es comunicarlas a los demás. Esto implica decir cómo te sientes y expresar que te estás sintiendo mal debido a ello. Al comunicar estos sentimientos, esto te ayudará a calmarte más, ya que tanto la otra persona como tú seréis más conscientes de ello.

Como vemos, no se trata de reprimir nuestros sentimientos. Por lo contrario, es mejor canalizarlos y resolverlos de una manera que no nos haga sentir peor. Aun así, debes recordar que llorar en una discusión es completamente válido y si lo necesitas, no hay nada de malo en hacerlo.

PUBLICIDAD

Escrito por

Blanca Alcanda

Licenciada en psicología. Máster en psicología general sanitaria, psicología clínica y de la salud y en psicología forense. Su enfoque terapéutico se basa en la terapia cognitivo-conductual y las terapias de tercera generación. Su objetivo es que sus pacientes mejoren su bienestar, dirigiéndose hacia la consecución de sus metas y valores propios.

Ver perfil

Bibliografía

Deja tu comentario

PUBLICIDAD

últimos artículos sobre autoestima

PUBLICIDAD