10 Beneficios de tener un gato según la psicología

A pesar de que desde hace unas décadas tener mascota se ha convertido en algo habitual, se suele pensar que los gatos son traicioneros o traen mala suerte. Nada más lejos de la realidad. Hay estudios que han demostrado que la compañía de los gatos es buena y nos aporta bienestar, pero... ¿Sabemos realmente los beneficios de tener un gato para nuestra salud? 

Beneficios psicológicos de tener un gato

Los animales pueden ayudarnos a combatir la soledad y nos aportan un cariño difícil de explicar. Además de todo ello, existen una serie de ventajas de tener un gato a nivel físico y emocional. Según los estudios realizados al respecto podemos identificar que un gato como mascota nos puede beneficiar en lo siguiente. 

1. Reduce las enfermedades cardiovasculares

Tras varios estudios realizados en los últimos años en Minessota y Reino Unido, se ha podido observar una relación entre el hecho de tener gato y la ausencia de enfermedades cardiovasculares y la reducción de hasta un 30% en la probabilidad de morir de infarto. ¿Por qué sucede esto? Abrazar a un gato o acariciar a los gatos reduce las pulsaciones y por ende, nuestra tensión arterial y como resultado las opciones de sufrir infarto o ictus disminuyen.

2. Reduce los niveles de estrés

Acariciar a un gato conlleva que la respiración se acompase y el ronroneo agradable del animal relaja nuestros nervios. Además, el ronroneo del gato es un masaje natural, ya que produce vibraciones de entre 20 y 140 hercios, lo cual también se ha demostrado en varios estudios de la Scientific American que es beneficiosa para la prevención de diversas enfermedades y trastornos psicológicos derivados de la ansiedad y el estrés. A pesar de ello, confiar solo en los gatos para reducir estas patologías no es la mejor solución. Si crees que tienes unos niveles de ansiedad y estrés muy altos siempre puedes consultar con un psicólogo profesional. 

3. Ayuda a que meditemos

Observar los movimientos elegantes de estos animales, cómo se lavan o como disfrutan de cada instante tan solo mirando por la ventana o adormeciéndose al lado de la calefacción, provoca que mimeticemos con ellos y aprendamos así a disfrutar de la relajación de estar en casa sin hacer nada, vivir con tranquilidad y disfrutar de cada pequeño momento. De esta forma, el gato como mascota puede permitirnos poder estar más en el presente y apreciar cada instante. 

4. Cada día tienes dosis de risas aseguradas

Otra de las ventajas de tener un gato es que estos son unos animalitos adorables pero también muy divertidos. Suelen animar el día con sus habilidades, locuras, juegos, sustos y momentos de torpeza. Al ser asustadizos, tienen reacciones que nos despiertan una carcajada y verlos entretenerse jugando mientras nos reímos es algo que activa nuestras ya conocidas hormonas de la felicidad.

5. Sube tu autoestima

Si estás falto/a de cariño, otro de los beneficios de tener un gato es una genial elección. Suelen venirte a buscar cuando llegas a casa, te piden mimos constantemente, se restriegan por tus piernas, dan cabezazos de afecto y muestran su amor incondicional hacia los compañeros humanos de la casa. Como te necesitan, sientes que estás cuidando de ellos y como consecuencia te sientes útil, por lo que el autoconcepto (lo que pensamos de nosotros mismos) y la autoestima (el afecto que sentimos hacia nosotros mismos) aumentan.

6. Disminuye la posibilidad de sufrir depresión y/o ayuda a superarla

Los gatos y en general las mascotas te mantienen ocupado. Son una responsabilidad porque su bienestar depende de que tú les cuides. Como ya sabes, la depresión se alimenta de la apatía (desinterés o desgana a la hora de hacer cosas) pero al tener gato y ver sus necesidades, te obligas a estar activo/a y hacer cosas. Si tienes depresión y no te apetece salir a comprarte comida, tu gato te pedirá alimento y aunque no lo hagas por ti, acabarás haciéndolo por él. Así, ayuda a activarse y a disminuir los efectos de la depresión así como a prevenirla, ya que si nos sentimos a gusto con ellos, sufrir este trastorno es menos frecuente. Tener un gato genera una sensación de bienestar que es producida por la liberación de oxitocina, que produce un efecto calmante y relajante en el cuerpo y por tanto, con la sensación de bienestar es más difícil que se desarrolle un trastorno del estado de ánimo. Si crees que estás en una situación de depresión es importante que consultes con un psicólogo profesional. 

7. Reduce la sensación de soledad

El hecho de llegar a casa y no encontrarla vacía es algo que nos hace sentir bien. Además, puedes hablar con ellos y se te quedan mirando como si entendieran lo que les estás explicando, por lo que no tendrás tanto la sensación de que no puedes hablar con nadie o que nadie te escucha. Incluso hay estudios de las universidades de Miami y Saint Louis que aseguran que la compañía de estos felinos cubren las necesidades sociales de las personas de un modo similar a como lo hacen los humanos. Por lo tanto, otro de los beneficios de tener un gato es precisamente poder sentirte más acompañado en tu propio hogar. 

8. Mejora el sistema inmunitario

Hay estudios que también han demostrado que amar a un gato así como recibir sus caricias, mejora el sistema inmunitario y por tanto, se mejoran las defensas y el riesgo de tener enfermedades se reduce. De esta forma, es bueno tener gatos en casa, ya que nos permite mejorar nuestro sistema inmunitario. 

9. Ayuda a la recuperación de lesiones o enfermedades

El ronroneo de un gato no solo es bueno a nivel emocional, sino que a nivel físico está demostrado que también ayuda. Así, estas frecuencias vibratorias ayudan a curar infecciones o inflamaciones, ayudan al fortalecimiento de los huesos, reduce las dificultades respiratorias (disnea) y mejora las lesiones en tendones, músculos y ligamentos.

10. Ayuda a mejorar los síntomas de autismo

Aunque es más habitual el trabajo con caballos o perros, los gatos también ayudan a fomentar la comunicación en niños con trastornos del espectro autista, ya que este tipo de niños sienten una mayor conexión con las mascotas que con los iguales. Al liberarse oxitocina cuando se acaricia a un gato, esta ayuda al aumento de los sentimientos de amor y confianza, y por ese motivo pueden comunicarse mejor con los gatos que con humanos.

Estos son algunos de los beneficios de tener un gato a tu lado. Por este motivo, si estás dudando entre tener y no tener a este animal de compañía, estas ventajas de tener un gato podrán ayudarte a tomar una buena decisión. 

¿Se pueden hacer terapias con gatos?

El veterinario francés Jean-Yves Gauchet descubrió hace unos años que los gatos se recuperan mejor que los perros tras una lesión o fractura. Empezó a sospechar que quizás se debía al ronroneo de estos animales ya que lo realizan cuando están a gusto y felices pero también cuando están estresados o cuando sufren.

Así es como surgió la idea de este veterinario para hacer un estudio y probar por tanto la eficacia del ronroneo en humanos. Dividió el grupo en dos, por un lado las personas que tenían que estar en sus casas sin la compañía de un gato, y por el otro lado personas que debían convivir durante un tiempo con gatos. Los resultados del estudio fueron muy reveladores, ya que se demostró claramente que el grupo que había estado conviviendo con gatos disfrutaba de una mayor sensación de serenidad, tranquilidad, dormían mejor y sentían un mayor índice de bienestar emocional que el grupo control, el que no había estado con gatos.

Posteriormente a este estudio se han realizado muchos otros que han corroborado la idea de que tener un gato ayuda a tener una mejor salud física y psicológica. La compañía de estos animales mejora la sensación de bienestar y tranquilidad. Además, aquellas personas que tienen este tipo de mascota en casa aseguran que su calidad de vida ha mejorado sustancialmente desde que conviven con gatos. Si ya lo decían los antiguos egipcios (cuna de la medicina moderna), ellos aseguraban que estar rodeados de gatos era beneficioso para la salud y era señal de buena suerte, así que por algo sería.

Actualmente se están realizando más estudios que relacionen el ronroneo con mejoras en la salud física, y se está demostrando que este ayuda a mejorar la presión arterial por lo que reduce el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, ayuda a mitigar el dolor crónico, los dolores de inflamación del estómago, los dolores menstruales y facilita la regeneración de nuevos tejidos.

¿Qué es exactamente el ronroneo?

Los gatos realizan un zumbido a través de la contracción de los músculos de la laringe moviendo las cuerdas vocales y dilatando la glotis y es el resultado de toda esa vibración el sonido del ronroneo. Ese movimiento es regular y rítmico, acompasado con la respiración del animal a un ritmo lento (unas 20-30 respiraciones por minuto) y a una frecuencia baja, de entre 20 y 25 hercios.

¿Por qué se considera terapéutico el ronroneo de un gato?

La frecuencia de entre 20 y 25 hercios está demostrado que genera emociones en las personas de la misma forma que lo hace la música ya que se conecta el cuerpo con las áreas del cerebro que tienen que ver con las emociones. Además, esta frecuencia de vibración es la misma que la utilizada en los ultrasonidos de electroterapia cuando vamos a rehabilitación tras una lesión o fractura para acelerar el proceso de recuperación del músculo o hueso.

Así pues, el ronroneo de los gatos produce beneficios físicos y emocionales que ayudan a reducir los niveles de estrés y ansiedad. A nivel psicológico escuchar el ronroneo activa una de las hormonas de la felicidad, la serotonina, la cual ayuda a mejorar el estado de ánimo previniendo la depresión y mejorando también la calidad del sueño. La serotonina funciona como neurotransmisor, es decir, conecta el cerebro con el resto del cuerpo y envía la señal de calma, plenitud y serenidad a la persona, relajando así músculos y por tanto, el cuerpo y la mente.

"Si hubiera que elegir un sonido universal para la paz, votaría por el ronroneo de un gato"

B.L Diamond

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