Misofobia o miedo a la suciedad: ¿Tienes una obsesión con la limpieza?

La misofobia es el miedo a la suciedad que desarrollan algunas personas. Identificada dentro del grupo de las fobias específicas, los llamados misófobos sufren un miedo irracional a la suciedad (o lo que ellos consideran suciedad) y también a la contaminación y a los gérmenes.

Este hecho les provoca un gran malestar e interfiere notablemente en sus hábitos y relaciones. Este tipo de fobia no tiene nada que ver con una preocupación normal por la limpieza sino que va mucho más allá y puede resultar altamente incapacitante. Además esta condición está muy relacionada con la germofobia, es decir el el miedo a los gérmenes. 

Veamos qué es la misofobia, qué síntomas tiene, cómo se relaciona con los trastornos obsesivos compulsivos y cómo se puede tratar para minimizar sus efectos y llegar a superarla.

¿Qué es la misofobia?

El término misofobia o mysophobia proviene del griego y de la combinación de las palabras “mysos”, que significa contaminación, y “phobos”, que significa fobia. No obstante, existen algunos otros conceptos más específicos que aluden a este mismo miedo a la suciedad como pueden ser bacilofobia, rupofobia, bacteriofobia o verminofobia, todas en relación a la fobia a los gérmenes.

La misofobia es, según los manuales internacionales, una fobia específica causada por un objeto o situación concreta y se puede clasificar dentro de las fobias raras que conllevan problemas como la ansiedad o el estrés. Según el profesor de Robert J. Campbell, que clasifica en su libro Campbell's Psychiatric Dictionary más de 230 tipos de fobias:

"Una fobia es un tipo de desorden de ansiedad que consiste en un miedo excesivo, injustificable e irracional debido a la presencia o anticipación de un objeto específico o situación”.

Esta fobia a la suciedad, conocida también por la enfermedad de la limpieza, se enmarca en todos los criterios anteriores y el objeto que causa el miedo irracional está relacionado con la posibilidad de contaminarse de elementos externos como microbios, gérmenes o cualquier cosa que esté en el ambiente o en un espacio cerrado que sea percibido como perjudicial para la salud.

Por este motivo, la misofobia, a diferencia de otras fobias concretas como el miedo a volar, a las arañas o el miedo al mar, puede llegar a ser incapacitante en la vida social ya que la suciedad está siempre presente en cualquier entorno. Normalmente quienes sufren este temor irracional son personas obsesionadas con la limpieza.

Comportamiento en personas con misofobia

Hace unos años, se hizo popular un vídeo que la modelo Naomi Campbell compartió en su canal de YouTube en el que desinfectaba su plaza en un vuelo. La top model se descubría así como misófoba al temer los gérmenes que podía contener ese espacio.

Las personas con misofobia tienen obsesión por la limpieza, tienden a lavarse las manos constantemente, a desinfectar concienzudamente todos los espacios en los que están y a no tocar determinados objetos o hacerlo con guantes o excesivo cuidado. Extreman la higiene de su casa y también evitan tocar donde toca mucha gente como puede ser los asientos del metro o las manetas de puertas de restaurantes, entre otros ejemplos.

Los misófobos pueden llegar a incrementar sus precauciones higiénicas sin límites, llevando mascarillas para hablar con gente desconocida, no comiendo nunca fuera de casa, rehuyendo el contacto físico o tirando la ropa después de usarla en determinados ambientes.

Por lo general, las personas con misofobia tienen el miedo a la suciedad o a la contaminación concentrado en las materias biológicas, las bacterias, virus, los olores corporales y en la suciedad por mínima e imperceptible que sea.

Criterios diagnósticos

Como ya hemos comentado, según los manuales DSM-5, de la American Psychiatric Association, y el CIE-10 de la Organización Mundial de la Salud, la misofobia se enmarca a nivel diagnóstico en la categoría de fobia específica ya que cumple los criterios para su diagnóstico que son los siguientes:

• Los síntomas son manifestaciones primarias de la ansiedad.
• La ansiedad se produce ante la presencia de los objetos o situaciones fóbicas específicas.
• Se trata de evitar esos objetos o situaciones que causan la fobia en la medida de lo posible.

Es decir, los misófobos sufren ansiedad ante la presencia de suciedad y evitan, siempre que pueden, su exposición a ella.

El miedo a la suciedad como TOC

El miedo a la suciedad se relaciona directamente con los trastornos obsesivo compulsivos. Existen numerosos tipos de TOC y estos son un conjunto de obsesiones, pensamientos intrusivos y recurrentes, y compulsiones, conductas repetitivas, que experimentan algunas personas.

En el caso de la misofobia o la fobia a la suciedad, el TOC se presenta como obsesiones de limpieza y lavado. La persona que presenta un temor obsesivo a contagiarse o a contraer una enfermedad tocando algo le lleva a evitar todas esas situaciones y a lavarse compulsivamente las manos o cualquier superficie y a desinfectarse constantemente. Estos rituales de limpieza los realiza como forma de reducir la ansiedad que le provoca estar en contacto con esas superficies contaminadas. En estos casos, se dice que las personas sufren también de un trastorno obsesivo compulsivo de limpieza. 

En el caso de coincidir tener la fobia (ya sea tanto en la misofobia como en la germofobia) y mostrar el TOC, estas personas suelen ser diagnosticadas de trastorno obsesivo compulsivo mientras que si las compulsiones no existen o son leves el diagnóstico solo sería de la fobia específica.

Síntomas de la misofobia

Los síntomas de la misofobia, además de todos los relacionados con los rituales de limpieza y de la evitación a exponerse a lugares sucios, pueden mostrar también consecuencias físicas y somáticas cuando esa evitación no es posible. Algunas de ellas pueden ser las siguientes.

1. Lavado de manos obsesivo

Los misófobos/as suelen tener la tendencia de lavarse las manos de manera excesiva y obsesiva. Tanto es así que hasta pueden llevar con ellos mismos una toallita limpiadora o un gel hidroalcohólico para poder estar tranquilos ante la suciedad que les rodea. 

2. Evitar ciertos lugares

Esta obsesión por la limpieza acaba por hacer que los que sufren de misofobia (y otras condiciones como la germofobia o el miedo a las enfermedades) suelen evitar los lugares que están muy colapsados de personas (como las plazas, centros comerciales, entre otros). 

3. Fijación por la limpieza

La misofobia es conocida por la enfermedad de la limpieza por que las personas que sufren de ella no pueden evitarlo. 

4. Miedo a contaminarse

En muchos casos los misófobos suelen sentir un miedo irracional a que los demás los ensucien. Por este motivo pueden evitar que los demás les toquen o intentan no tocar los objetos que les rodean. 

5. Síntomas propios de las fobias

Al ver la suciedad, las personas que sufren de esta obsesión y su significado suelen no sentir los síntomas comunes de todas las fobias. Entre ellos, podemos encontrar los siguientes.

• Ansiedad
• Crisis de angustia
• Ataques de pánico
• Sudoración
• Palpitaciones
• Mareos, hormigueos y temblores
• Nauseas y vómitos

Si te sientes respresentado con muchas de estas afectaciones, es posible que tengas un caso de misofobia. Por este motivo, si estás deseando ponerle remodio a esta obsesión por la limpieza, puedes consultarlo con un profesional de la salud mental. 

Otras fobias relacionadas con la obsesión con la limpieza

Aunque hemos englobado dentro de misofobia el general de las fobias relacionadas con la suciedad, existen otras variables que merecen un apartado aparte al ser más concretas.

• Amatofobia

Se trata del miedo al polvo como una forma específica de suciedad. Las personas que lo sufren tienen un cuidado exhaustivo de la limpieza del hogar.

• Autodisomofobia

Es el miedo a oler mal, tanto en lo referente al olor propio como el ajeno o el de un determinado espacio. Esta fobia, como las demás, puede desencadenar una respuesta ansiosa y resultar altamente incapacitante.

• Nosofobia

La nosofobia hace referencia a aquellas personas que tienen una obsesión con la limpieza causado por el miedo a las enfermedades. Estas personas suelen estar contantemente limpiando su alrededor sólo por el hecho de evitar padecer una enfermedad. Esta fobia a las enfermedades también está relacionada con la germofobia. 

• Germofobia

Un germofóbico o una germofóbica es una persona que sufre de una obsesión por la limpieza debido a que tiene un temor irracional a los gérmenes que le rodean. En muchos casos, como hemos dicho, esto puede estar muy relacionado con el miedo a las enfermedades. 

Posibles causas de la fobia a los gérmenes

La mayoría de los miedos irracionales tienen como causa una experiencia traumática que en el caso de la fobia a los gérmenes puede deberse a una educación extremadamente exigente con la limpieza y la higiene desde pequeños. Niños que han convivido con reglas estrictas en este sentido, tienen más probabilidades a desarrollar miedo a la suciedad.

Otra posible causa es cuando se es alérgico o cuando se ha vivido de cerca alguna infección que provoque la obsesión por tomar medidas para que no vuelva a ocurrir llegando a afectar a todos los ámbitos de la vida. Asimismo, hay expertos que indican la importancia del componente hereditario, que señala la predisposición genética que tienen algunas personas a verse afectadas por miedos irracionales, fobias o trastornos obsesivo compulsivos.

No obstante, las causas de la fobia a la suciedad no están claras ya que entran en juego muchas variables así como la intensidad de los efectos y de la ansiedad que provoca en cada persona.

¿Cómo superar una obsesión con la limpieza o la misofobia?

Fobias como la misofobia pueden resultar altamente limitantes para la persona. El hecho de sufrirla impacta no solo en quien la padece sino en todo su círculo ya que la suciedad está presente en todos los sitios. Por este motivo, buscar ayuda de manos de un profesional de la psicología para poder superar el miedo es la mejor opción.

Ya en manos de un psicólogo, uno de los tratamientos para la misofobia que ofrece buenos resultados en el caso de las fobias y de la ansiedad que producen es la terapia cognitivo-conductual. Este tipo de terapia tiene como objetivo actuar sobre los pensamientos para modificar la conducta y mejorar las emociones. Además, promueve la reestructuración cognitiva para fomentar otro tipo de creencias y comportamientos y que el paciente pueda enfrentarse a algunas situaciones referentes a la fobia, también utiliza técnicas de autocontrol y de exposición con ayuda y acompañamiento del profesional.

En definitiva, la misofobia o miedo a la suciedad y todas las consecuencias que ello conlleva tiene solución con un tratamiento adecuado en manos de profesionales de la psicología.

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