Un trastorno de la personalidad implica experimentar patrones para pensar y actuar de forma muy diferente a lo que la sociedad considera habitual o normal. Pero, existen muchos tipos de trastornos de la personalidad diferentes, lo que implica que no todos comparten los mismos rasgos o síntomas. Entonces, ¿Qué implica padecer de un trastorno de la personalidad?
¿Qué es un trastorno de personalidad?
Un trastorno de personalidad es un problema emocional que atañe al comportamiento de una persona, hasta el punto de que le genera malestar para interactuar con los demás. Y ello se debe al patrón rígido e inflexible de esa persona. Por tanto, su comportamiento dista de lo que es normal. Como ya hemos indicado, la consecuencia más evidente del trastorno de personalidad se observa en el modo que tiene ese sujeto para relacionarse o controlar sus impulsos. En definitiva, los actos de estas personas no entran dentro de la norma social establecida.
Principalmente, nuestra personalidad hace referencia a la manera en la que pensamos, sentimos y nos comportamos ante los demás. Por ello, esto es lo que nos diferencia de una persona a otra. La personalidad de un individuo está influenciada tanto por las experiencias, como por el entorno y/o las características heredadas. Por lo tanto, cuando se padece de un trastorno de la personalidad las personas acaban viendo afectada su capacidad para pensar, sentir y comportarse de la manera que se espera dentro de una cultura. Esto puede causar angustia así como otros problemas relacionales y profesionales.
¿Cuáles son los síntomas de los trastornos de personalidad?
Las personas que padecen trastorno de personalidad sienten que viven en una continua inestabilidad que afecta a sus relaciones sociales, familiares y personales. Asimismo, influye en ámbitos como la pareja, pero también en el trabajo. Dependiendo del tipo de trastorno de personalidad que tenga un individuo, los síntomas variarán. Normalmente, un trastorno de la personalidad afecta dos de los siguientes aspectos:
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Autoimagen inestable: Una personalidad paranoide o que sufra de uno de los trastornos de la personalidad que hemos descrito, suele tener una autoimagen muy poco definida de sí mismo/a. Una persona que sufre de algún desorden mental tiene una autopercepción que varía en función del estado de ánimo que tiene en el momento.
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Inconsistencias en los valores, metas y la apariencia: Los cambios en la personalidad son tantos que el enfermo mental suele acabar cambiando de objetivos o de percepción hacia la vida constantemente. Tanto es así que sus seres queridos pueden acabar viéndose perjudicados por su actitud.
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Insensibilidad hacia los demás: La incapacidad de sentir empatía es uno de los factores en común del carácter de una persona que sufre de uno de los problemas mentales expuestos. A pesar de que pueden sentir afecto hacia los demás no suelen ver como su actitud puede afectar a sus relaciones más cercanas.
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No saber poner límites: Los límites es otro de los problemas más comunes que sufren las personas con una de estas enfermedades psiquiátricas. Es por ello, que en la mayoría de individuos que padecen de estos trastornos mentales acostumbran a tener una actitud impulsiva y peligrosa hacia si mismos.
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Patrones de comportamiento crónicos: En cualquier trastorno de la personalidad uno de los síntomas más persistentes es precisamente el comportamiento extraño y crónico que suelen presentar las personas que tienen un desorden mental.
Estos son algunos de los síntomas más persistentes en estas enfermedades de la mente. En el caso que te sientas identificado/a con alguno de estos rasgos de la personalidad es vital acudir a un psicólogo profesional.
¿Cuáles son las causas de los trastornos de personalidad?
La personalidad de un individuo está predestinada por factores biológicos, pero cambia a lo largo del tiempo. De este modo, muchas características, pensamientos y comportamientos que definen la personalidad de un sujeto se forjan durante la infancia y adolescencia. Entre las causas hemos de destacar factores biológicos, genéticos y sociales.
Los investigadores afirman que algunos de estos patrones son hereditarios, como el temperamento y el carácter. Por eso, los expertos resaltan que es más común padecer trastorno de personalidad en familias con antecedentes de esquizofrenia o trastornos afectivos.
Por su parte, entre las causas biológicas los investigadores señalan las monoaminas oxidasas, que suponen una degradación de neurotransmisores como la serotonina, o un exceso de testosterona. Finalmente, el entorno familiar y social de la persona puede influir en estos trastornos, ya que la personalidad se ve modificada, de manera directa o indirecta, por los patrones que definen los padres, profesores o el entorno social.
¿Cuáles son los tipos de trastornos de la personalidad?
Los trastornos de personalidad se estructuran en tres grandes grupos en función de las características usuales y los síntomas que presentan. Así, hablaremos de los siguientes grupos: A (cuya principal característica es la excentricidad), B (donde se aglutinan los que se muestran inestables) y C (que englobaría a los temerarios).
Grupo A
- Trastorno de la personalidad paranoica: Las personas con uno de estos trastornos de la personalidad pueden desconfiar mucho de los demás y sospechar de los motivos que tienen para hablar o actuar de una manera específica.
- Trastorno esquizoide de la personalidad: Las personas con este tipo de personalidad patológica suelen mostrar poco interés para entablar relaciones personales o participar en diferentes interacciones sociales. De hecho, experimentar problemas para interpretar las señales sociales, lo que hace que sean emocionalmente distantes.
- Trastorno esquizotípico de la personalidad: Los síntomas de este trastorno de la personalidad implica experimentar de la creencia de que se puede influir tanto en las personas como en los eventos y/o pensamientos. Además, las personas con este trastorno de la personalidad tienden a malinterpretar los comportamientos dando lugar a respuestas emocionales inapropiadas.
Grupo B
- Trastorno de la personalidad antisocial: Las personas que padecen de este trastorno de la personalidad tienden a manipular a los demás sin expresar el menor remordimiento por sus acciones. De esta forma, pueden llegar a participar en comportamientos deshonestos como mentir y robar, así como tienen tendencia a consumir alcohol y drogas.
- Trastorno límite de la personalidad: Las características de la personalidad límite implican sentimientos de vacío y abandono. De hecho, este trastorno de la personalidad hace que las personas tengan dificultades para lidiar con eventos estresantes así como experimenten cierta paranoia. Además, padecen de comportamientos impulsivos que pueden suponer un riesgo, como puede ser beber en exceso.
- Trastorno de personalidad histriónica: Las personas con este trastorno de la personalidad suelen tratar de llamar la atención de los demás intentando ser dramáticas o provocativas. Por otro lado, son muy influenciadas por otras personas porque tienen mucha sensibilidad a las críticas o a la desaprobación por parte de los demás.
- Trastorno narcisista de la personalidad: Las personas con trastorno de la personalidad narcisista a menudo creen que son más importantes que otras. De hecho, tienden a exagerar sus logros y pueden presumir de su atractivo y/o éxito. Este desorden de la personalidad también incluye una necesidad de sentirse admirado/a por los demás, así como una falta de empatía por las demás personas.
Grupo C
- Trastorno de la personalidad por evitación: Este trastorno de la personalidad implica experimentar sentimientos de insuficiencia, inferioridad o falta de atractivo. De hecho, las personas que padecer de este trastorno pueden obsesionarse con las críticas de los demás y tratar de evitar participar en actividades sociales.
- Trastorno de personalidad dependiente: Estos trastornos de la personalidad implica depender de otras personas para lograr las satisfacciones de la necesidad emocionales y físicas. De este modo, las personas con el trastorno de la personalidad dependiente suelen evitar la soledad y requieren de los demás para tomar ciertas decisiones.
- Trastorno de personalidad obsesivo-compulsiva: Estos tipos de personalidad suele implicar la necesidad de tener mucho orden. Además, requieren ciertas reglas para poder evitar ciertos pensamientos obsesivos así como participan en diferentes rituales para lograr calmar la ansiedad que les provoca.
¿Cuáles son las consecuencias de un trastorno de la personalidad?
Un trastorno de personalidad afecta a la vida social y personal de la persona que lo padece, pero también a quienes conviven con él. Las dificultades para interactuar los convierte en personas con tendencia a la soledad. Presentan problemas para trabajar en equipo, mantener relaciones personales, asumir riesgos, sentir empatía… Como hemos dicho, no solo afecta a que padece el trastorno, sino a aquellos que conviven con él, es decir, sus familiares o parejas.
¿Cómo se tratan los trastornos de personalidad?
El tratamiento que mejores resultados da es la terapia cognitivo-conductual, pues permite actuar sobre los pensamientos de los pacientes para modificar sus hábitos de conducta, su comportamiento y su relación con los demás. Se busca controlar los impulsos y la ansiedad, se trabaja para mejorar la crítica, la empatía. Asimismo, se busca incrementar las habilidades sociales y las relaciones personales.
Es muy probable que las personas que padecen de alguno de los diferentes trastornos de la personalidad no busquen un tratamiento por sí mismas, por lo tanto, en muchos casos no acaban recibiéndolo.
Por otro lado, la mayoría de los trastornos de la personalidad son difíciles de curar. Sin embargo, el tratamiento puede ayudar a aliviar muchos de los síntomas relacionados con estos tipos de trastornos.
El tratamiento suele variar en función de los rasgos de la personalidad y del trastorno, pero la psicoterapia suele ser uno de los métodos más efectivos. En algunos casos a la terapia psicológica se le agregan algunos fármacos para calmar la ansiedad, psicosis, depresión o impulsos que pueden implicar estos problemas de la personalidad.
¿Cómo afrontar un trastorno de la personalidad?
En comparación a otras enfermedades mentales o problemas mentales, existen pocos estudios sobre cómo tratar estas afectaciones de la personalidad. Aun así los profesionales de la psicología intentan mostrar algunas herramientas para controlar estos rasgos de la personalidad.
- Reducir la angustia: Este problema mental suele ir acompañado en muchas ocasiones por trastornos como la ansiedad y la depresión. Por este motivo, los psicólogos suelen tratar estas afectaciones ya que pueden tener muchas consecuencias negativas en la persona que los padece.
- Ayudar a comprender el problema: Identificar el problema es uno de los primeros pasos para tratar el trastorno de la personalidad. Ser consciente de la actitud que genera discordia ante los demás puede ayudar a la persona a controlar ciertos comportamientos que afectan tanto a sí mismo como a sus seres queridos.
- Actuar ante ciertos comportamientos: Cuando tenemos identificadas las actitudes o comportamientos que afectan y hacen que surjan problemas para relacionarse con los demás, se practican esas situaciones para cambiar la manera en que se actua de forma errónea.
- Modificar ciertos rasgos de la personalidad: Existen algunos tipos de carácter de una persona que pueden comportar consecuencias negativas para la salud mental o física de esta. Por ello, los psicólogos ayudar a cambiar de estos rasgos de la personalidad aquellas creencias que perjudican la autoestima o autopercepción de la persona que lo padece.
- Autocuidado: Cuidarse a uno mismo es una de la claves para afrontar cualquier trastorno de la personalidad o enfermedad mental que se nos venga encima. Por este preciso motivo, el ejercicio físico, la alimentación saludable y aprender a estar con nosotros es sin duda una de las estrategias más efectivas para intentar apaciguar estos trastornos de la personalidad.
Todos los casos en que existe un desorden mental de este calibre es esencial la intervención de un profesional de la salud mental. Aprender sobre estas enfermedades mentales y trabajar en el bienestar mental y físico debe ser una de las prioridades cuando se detectan estos tipos de trastornos. La actitud ante ellos muchas veces marca la diferencia.
¿Quién te puede ayudar?
El especialista indicado para el tratamiento de cualquier trastorno de personalidad es el psicólogo. Por tanto, si crees que tienes un problema de adaptación, si te das cuenta de que tu comportamiento no se corresponde con lo socialmente establecido, si tienes dificultades para interactuar con los demás, pide ayuda profesional.
El psicólogo te escuchará, evaluará los síntomas o manifestaciones y determinará si realmente tienes un trastorno de personalidad o no. En el caso afirmativo, diagnosticará de qué tipo se trata y te ofrecerá el mejor tratamiento para que puedas controlarlo.
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Bibliografía
- What are Personality Disorders? American Psychiatric Association. https://www.psychiatry.org/patients-families/personality-disorders/what-are-personality-disorders
- Personality Disorders. Cleveland Clinic. https://my.clevelandclinic.org/health/diseases/9636-personality-disorders-overview
- Ditzell, J (2021). Personality Disorder. Healthline. https://www.healthline.com/health/personality-disorders