¿Cómo dejar de comer por aburrimiento? 10 Consejos para evitarlo
¿Por qué recurrimos a la comida cuando estamos aburridos/as? ¿Qué podemos hacer para afrontar el comer por aburrimiento? Descubre las claves para evitar este mal hábito.
Comer cuando estás aburrido/a implica que estamos recurriendo a una acción compulsiva para calmar ciertos sentimientos de apatía. De hecho, a diferencia de la alimentación emocional, este tipo de acciones suelen ocurrir cuando las personas afrontan el vacío o la insensibilidad. Al comer más por aburrimiento, más mantenemos la sensación estática de desconexión.
¿Cómo dejar de comer por aburrimiento?
Existen cosas que definitivamente no te ayudarán a superar esta situación. Por ejemplo, restringir tu dieta. Esto es debido a que comer por aburrimiento no se trata realmente de sentir o experimentar aburrimiento. En realidad, en muchos casos simplemente se trata de una acción compulsiva para intentar calmar la sensación de vacío o de apatía que podemos sentir cuando estamos aburridos. Teniendo esto en cuenta, algunos consejos que podemos seguir para afrontar el aburrimiento y la ansiedad son los siguientes:
- Busca la emoción principal: En muchos casos, la causa fundamental del aburrimiento por comer se trata de una emoción primaria no deseada. Es muy probable de que, si estás comiendo por aburrimiento, exista una emoción negativa que impulse este acto.
- Come poniendo más atención: Intenta tomar más conciencia de lo que haces en cada instante. Es decir, estar más atento y centrado en el momento presente. Comer con mayor atención significa ser consciente de tus estados mentales y de cómo te sientes físicamente al relacionarte con la comida. De hecho, las investigaciones al respecto muestran que la atención plena es especialmente útil para ayudar a las personas a reducir la ingesta en respuesta a emociones como el aburrimiento.
- Entiende tus señales de hambre: A veces podemos creer que tenemos hambre, pero en realidad solo queremos comer por aburrimiento. De hecho, existen muchos signos que pueden darnos a conocer si tenemos hambre. Por ejemplo, cuando nuestro cuerpo tiene hambre física y necesita calorías para obtener energía, puedes notar señales como rugidos en el estómago, dolor de cabeza y sensación de fatiga. En cambio, cuando se trata de aburrimiento, si bebes un vaso de agua, es posible que ya no sientas hambre.
- Acepta el aburrimiento: Con el ritmo que tenemos en la sociedad actual, es completamente normal que atribuyamos negatividad al aburrimiento. Pero, en realidad, existen beneficios detrás de un momento de calma y tranquilidad. Por ejemplo, puede ayudarnos a fomentar nuestra creatividad y sobre todo reflexionar sobre nuestra vida y estado actual.
- Tómatelo con calma: No te machaques si en algún momento recurres a la comida cuando estás experimentando aburrimiento. Cuando esto ocurra, no te lo tomes como un fracaso. Por lo contrario, utilízalo como una experiencia de aprendizaje y una oportunidad para comprender y tratarte con una mayor comprensión.
- Conoce tus desencadenantes: Es muy probable que existan algunos desencadenantes que puedan hacer que acabes experimentando hambre por aburrimiento. Identificar estas señales pueden ayudarte a romper el hábito. Algunos de los factores que más afectan al hambre por estrés son el estrés y tener a nuestra disposición alimentos. Para entender qué es lo que te motiva a comer cuando estás aburrido/a un buen sistema es precisamente anotar nuestros antojos en un diario, así como qué es lo que sentíamos en estos instantes y qué era lo que pensábamos.
- Evita comer delante de una pantalla: Comer delante de una pantalla mientras estamos aburridos puede influir en que comemos en exceso cuando ni siquiera tenemos hambre. Muchas personas recurren a actividades como ver la televisión o mirar ciertas redes sociales, cuando se sienten aburridas.
- Cambia de lugar o actividad: Un pequeño gesto, como cambiar de lugar, te ayudará a olvidarte de la comida cuando estás aburrido/a. Es decir, cuando creas que tu hambre es por aburrimiento, una buena manera de luchar contra las ganas de picar algo es simplemente levantarnos y cambiar de sitio, aunque sea de una habitación a otra. Esto es efectivo, ya que es un gesto suficiente para distraer nuestra mente de la comida hasta que pase el aburrimiento.
- Da un paseo: Si te sientes aburrido/a, dar un paseo no solo te distraerá de las ganas de picar, sino que también te alejará físicamente de las diferentes tentaciones alimentarias. Un paseo de veinte minutos es suficiente para que vuelvas a centrarte y a olvidarte de las ganas de picar por aburrimiento.
- Crea nuevos hábitos: En lugar de picar, intenta aprovechar el aburrimiento para probar cosas nuevas. Es decir, intenta pensar en aquello que te gustaría probar e inténtalo. Por ejemplo, puedes empezar a leer un libro o practicar un arte como la pintura o la escritura. Es decir, intenta hacer que el aburrimiento te estimule a hacer cosas significativas para ti.
Comer por aburrimiento no significa que estés afrontando un problema psicológico. Pero, si este mal hábito te está afectando a nivel emocional y en tu autoestima, es vital que empieces a intentar cambiarlo a través de pequeños pasos. Si sientes que no puedes afrontarlo, te recomendamos la ayuda de un profesional de la salud mental. No dejes que tus emociones controlen tu vida y tus hábitos.
Las informaciones publicadas por MundoPsicologos no sustituyen en ningún caso la relación entre el paciente y su psicólogo. MundoPsicologos no hace la apología de ningún tratamiento específico, producto comercial o servicio.
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