¿Cómo saber si soy una persona tóxica? 9 Señales para saber si soy tóxico/a

Todos sabemos identificar a las personas tóxicas de nuestro alrededor, ya que encontrarse con alguien con esta actitud suele ser muy desagradable. Pero ahora bien, ¿Qué puedes hacer si crees que la persona tóxica eres tú? El primer paso y algo muy positivo es darse cuenta de que puedes llegar a serlo.

El primer paso para cambiar algo es reconocer que hay un problema y si sospechas que puedes llegar a ser una persona tóxica, es buena señal, ya que el reconocimiento te hará libre de cambiarlo. 

¿Qué es una persona tóxica?

Una persona tóxica es alguien que actúa de una manera en la que sin quererlo lastima a los demás y hace daño a aquellos que le rodean. Normalmente, las personas tóxicas no saben que lo son y actúan debido a que están mal y no se dan cuenta de que lo transmiten a sus seres queridos. A veces sin saberlo, las personas podemos tener estos comportamientos tóxicos y no ser conscientes. 

La buena noticia es que un tóxico o tóxica puede dejar de serlo si toma conciencia de los hábitos que pueden perjudicar a los demás. De este modo, es bueno identificar esas acciones 'tóxicas' para dejar de hacerlas y contribuir a construir mejores relaciones. 

¿Soy una persona tóxica? Test

Para saber si tienes actitudes propias de las personas tóxicas, aquí te dejamos un test con el que podrás comprobarlo. 

¿Cómo saber si soy una persona tóxica?

Además de realizar el test, también existen algunas señales que pueden ayudarte a identificar si eres tóxico o tóxica hacia los demás. Si quieres saber cómo es una persona tóxica y si tú lo eres, estos son sus rasgos más comunes. 

1. Abusar de los demás: si te das cuenta de que solo llamas a algunas personas cuando te interesa o para sacar algún tipo de beneficio, te estás aprovechando de la bondad de la gente y de la posible amistad. Esto no te convierte en un amigo tóxico/a de por sí, simplemente debes intentar ser más considerado/a con las personas que te rodean. 
2. Manipular a la gente: Consigues girar siempre la tortilla. Aunque seas responsable de algo acabas haciendo creer a la otra persona que es culpable. Del mismo modo, consigues que los demás hagan lo que tú quieres aunque sepas que va en contra de sus principios y valores. Una persona tóxica siempre intentará manipular a los demás para conseguir aquello que tanto desean. 
3. Ir a donde duele: Cuando discutes eres capaz de hacer mucho daño. Sabes qué tecla tocar y lo haces con gran naturalidad. Luego pides perdón pero ese perdón no es sincero, ya que en la próxima discusión volverás a hacer lo mismo.
4. Chantajeas y reprochas continuamente: Tienes una gran capacidad para memorizar todo aquello que te ha dolido en algún momento y a la primera de cambio lo sacas a relucir para salirte con la tuya. Además, eres capaz de amenazar con algo que sabes que le dolerá a la otra persona para así conseguir tus propósitos cuando quieres que los demás hagan algo por ti. Este tipo de chantajes son propios de un tóxico o tóxica.
5. Te lo pasas bien insultando y criticando a los demás: Te gusta "despellejar" a todo aquel que se cruza en tu camino. Cuando la conversación no se basa en criticar o hablar mal de alguien, te aburres.                     
6. Todo es una competencia: Un hombre tóxico o mujer tóxica suele competir en todo lo que puede, incluso en aquello que no debería serlo. Si al estar con una persona sueles decir el 'y yo más' o simplemente compites para ser mejor que él o ella, es que eres una pareja tóxica o un amigo/a tóxico/a. 
7. Quieres ser siempre el centro de atención: Está bien querer ser el centro de atención cuando tenemos buenas y malas noticias, pero cuando esto se convierte en una costumbre quizá es que tengas un comportamiento algo tóxico. 
8. Señalas los defectos de los demás: Si como costumbre estás siempre señalando los defectos de los demás, quizá deberías replantearte este tipo de comportamientos. Es bueno indicarle a alguien un defecto si este te lo pide o si está interfiriendo en vuestra relación, pero como regla general no es buena ir diciéndole a las personas qué deberían mejorar. Es mejor centrarnos en arreglar nuestros defectos antes que los de los demás.
9. Siempre tienes la razón: A todo el mundo le gusta tener razón, pero como es obvio, todos nos equivocamos. Una persona tóxica suele no recapacitar nunca, incluso cuando ve que realmente no tiene la verdad. 

Estas son algunas de las actitudes y comportamientos que pueden identificar a una persona tóxica. Es común que todos tengamos en algún momento u otro algún rasgo que hemos descrito, ya que todos podemos tener malos días o pasar malos momentos. Lo importante en estos casos es identificar que existe un problema en nosotros y que debemos solucionarlo.

¿Por qué soy tóxico o tóxica?

Cuándo las personas estamos en una mala racha, estamos cansados y vemos el mundo con un tono pesimista, es cuando nuestros comportamientos tóxicos afloran. Una persona tóxica suele actuar de esta forma no porque le guste hacer daño a la gente, si no debido a que está pasando por una mala situación en su vida. Es por ello que cuando frases cómo 'me siento mala persona' se traducen en un comportamiento tóxico, esta es una señal de que necesitamos la ayuda de un psicólogo profesional. 

¿Cómo dejar de ser tóxico o tóxica?

Si quieres cambiar un comportamiento tóxico, es porque te has dado cuenta de que hay algo en ti que no funciona, te sientes culpable o porque la gente se está yendo de tu lado. Todos podemos cambiar y el primer paso es darse cuenta de que estamos ante un problema. 

1. Aprende a ponerte en el lugar de la otra persona: Seguramente no tienes muy desarrollada la empatía. Esta es la capacidad para ponerte en el lugar de las otras personas. Si a ti no te gustaría que te criticaran, no lo hagas con los demás. Si no te gustaría que te utilizaran, no utilices tú a la gente. Piensa en cómo puede afectarle a la persona que tienes delante esas manipulaciones y actúa en consecuencia.
2. Desarrolla habilidades sociales: Aprende a relacionarte hablando de temas que te interesen, temas más positivos y que no impliquen "despellejar" a alguien. Crea tu propio listado de temas de interés, aficiones, hobbies, habilidades, etc. Habla también de tu mundo interno y de lo que sientes.
3. Escucha a los demás: Las relaciones no son unidireccionales. Prueba a escuchar a las otras personas que tienes en tu vida. Interésate por ellas, pregunta, acepta a la otra persona, valora las virtudes de los otros, enfócate en los demás y deja de mirarte el ombligo. Si ves que en les estás hablando más del 70% del tiempo, intenta compensarlo preguntando y haciendo que hable el otro.
4. Deja de competir con los demás: No puedes ser el/la mejor en todo. Acepta que habrá personas que preferirán estar con otros a estar contigo pero eso no quiere decir que no te quieran como amigo/a. Trabaja tus celos y haz un poco de autocrítica. Si todo el mundo escoge a otra persona antes que a ti, ¿qué puedes estar haciendo mal?
5. Intenta ver el lado positivo de las cosas: Siempre estás en lo negativo; prueba a ponerte en el otro lado. Piensa en las cosas positivas que tiene lo que te sucede y lo que le sucede a los demás. Es un ejercicio que te va a costar pero todo o casi todo en esta vida tiene una parte positiva y se vive mucho mejor viendo esa parte que viendo lo que hace sentir mal.

Para acabar, me gustaría lanzar la siguiente reflexión: si eres una persona tóxica, probablemente sueles buscar un problema a cada solución, intenta hacer el ejercicio contario y busca soluciones a los problemas. Y por último, deja de utilizar a los demás como el cubo en el que echar tu basura, si sigues haciéndolo la gente acabará distanciándose de ti.

Las informaciones publicadas por MundoPsicologos no sustituyen en ningún caso la relación entre el paciente y su psicólogo. MundoPsicologos no hace la apología de ningún tratamiento específico, producto comercial o servicio.