La maternidad: 9 consejos sobre ser madre y el embarazo que deberías conocer

Durante la maternidad cambian muchas cosas. Pero lo que no saben la mayoría de personas ser madre implica más cambios de los que se pueden ver a primera vista. Existen muchos estudios que apuntan que ser mamá acaba modificando la estructura del cerebro desde el primer momento en la que se está embarazada. ¿Qué implica realmente la maternidad?

¿Cómo cambia el cerebro durante la maternidad?

Vivir la maternidad implica diferentes cambios en el cerebro de la madre. Según las recientes investigaciones, cuando una mujer entra en la maternidad algunas regiones del cerebro sobre todo aquellas involucradas en la regulación de las emociones empiezan a cambiar. Debido a ello, al vivir la maternidad las mujeres empiezan a experimentar cambios en su actitud relacionados con la empatía, la motivación materna y a sentir más sus emociones. 

¿Qué es la maternidad y que implica?

La maternidad/paternidad viene cargada de ideas preconcebidas que una vez en la realidad, con nuestro hijo recién nacido en brazos, vemos que se van cayendo por si solas y es ahí donde nos enfrentamos a muchas emociones: frustración, rabia, tristeza, etc.

El proceso de ser padres viene acompañado de muchos momentos, unos de luz y otros de sombra, en los cuales hemos de vernos cara a cara con aquellas cosas de la maternidad que no esperábamos. De este modo, existen una serie de hechos que cambiarán al pasar a ser madre que en muchos casos no se esperan. Tanto es así que los psicólogos destacan las siguientes realidades de la maternidad. 

1. Las hormonas y los cambios cerebrales harán que sea un proceso difícil: La maternidad y el embarazo es un proceso más difícil de lo que imaginamos. La realidad es que existen una serie de cambios hormonales y por la tanto, emocionales que hacen que ser madre sea un proceso complicado debido a los altibajos que se experimentan durante el embarazo y el post-parto. Además en muchas ocasiones estos cambios acaban afectando las habilidades de afrontamiento que tienen las personas ante los problemas.       
2. No serás feliz en todos los instantes: Como hemos dicho, la maternidad es un proceso duro. Es obvio que tener un hijo o una hija es un momento único y especial, pero la realidad es que a pesar de que toda la felicidad que implica tener un bebé en muchos casos la situación se pondrá difícil. Pensar que durante la maternidad solo hay felicidad es un error que solo hará que te sientas peor en estos instantes. La clave será buscar la alegría en los pequeños instantes que nos regalan los pequeños durante su evolución y desarrollo. 
3. No es normal convivir con la ansiedad o la depresión durante la maternidad: Tanto la ansiedad como la depresión afectan a una de cada cinco madres durante el proceso de la maternidad. Por este motivo debes tener en cuenta las señales de alarma de estas patologías y acudir a un psicólogo profesional si sientes que no puedes con ello. En muchos casos estas afectaciones pueden dejar secuelas si no se tratan en el momento. 
4. No es posible vivir la maternidad sola: A veces se nos vende la idea de que es posible ser madre sin la ayuda de nadie más. Esto no es cierto. La realidad es que el apoyo durante la maternidad es crucial tanto para el bebé como para la salud mental de la madre. Debes tener a alguien con quien confiar cuando no puedas permitirte estar junto a tus hijos debido al cansancio físico y mental. 
5. La pérdida es parte de la maternidad: Uno de los cambios más importantes durante la maternidad será precisamente alrededor de la pérdida. No podrás evitar dejar de lado tu trabajo, tus objetivos personales y tu descanso para ser mamá. Durante los primeros años, ser madre comportará una serie de pérdidas que debes conocer y valorar.                           
6. No se trata de tener al hijo/a perfecto: En muchos casos las madres llegan a tener una obsesión para cuidarlo todo alrededor de la pequeña persona que se está formando. Tenerlo todo perfecto no es realista, en algún momento las personas fallan y eso es lo que nos hace humanos. No debes preocuparte por cada decisión que tomes, solo es esencial que disfrutes y lo intentes hacer lo mejor que puedas. 
7. No te olvides de ti misma: Durante la maternidad muchas madres acaban dejándose a sí mismas. A pesar de que durante los primeros meses esto es un proceso completamente normal, la realidad es que en muchos casos debes intentar dejarte unos instantes pare cuidarte a ti misma. La clave para que puedas vivir la maternidad de la mejor forma es precisamente intentando cuidar tu amor propio durante este proceso. 
8. Encuentra tiempo para descansar y dormir: Las madres primerizas tienden a experimentar muchas dificultades para manejar sus horarios de sueño. De hecho, es muy común que acaben lidiando contra el insomnio. Por este motivo, es crucial que intentes no asumir toda la carga del trabajo por ti sola, sino que pidas ayuda a tus familiares y pareja si estás experimentando un mal descanso. 
9. Practica el diálogo interno positivo: Ya seas madre primeriza o no, es completamente normal que tengas dudas acerca de cómo lo estás haciendo. Sin embargo, debes prestar más atención a como te hablas a ti misma. Es decir, no debes permitir que tus inseguridades te hagan sentir como insuficiente o una 'mala' madre. Al hablarnos a nosotros mismos de malas maneras lo que hacemos es limitar nuestro potencial, por lo tanto, es esencial intentar practicar un diálogo interno más positivo hacia ti misma. Esto implica revisar cómo son tus pensamientos y cómo te diriges hacia ti misma. De hecho, tratarte con mayor amabilidad te ayudará a tener mayor resiliencia y sobre todo sentirte más positiva. 

Ser madre es un proceso que cambia por completo a las mujeres. Estos instantes, tendrán momentos buenos y malos, pero el fruto de todo este esfuerzo merecerá mucho la pena. Aunque debemos dedicarnos a nuestros hijos, en muchos casos cuidar de nuestra salud mental también es esencial para conseguir el mejor desarrollo para los recién llegados a la familia.

Mitos sobre el embarazo y la maternidad

Tanto el embarazo como el parto son dos momentos emocionantes y a la vez aterradores para las mujeres. El cuerpo y la mente de la mujer pasarán por muchos cambios físicos y emocionales a lo largo de todas estas etapas. Aunque se trata de un proceso muy especial, es normal que las mujeres se vean angustiadas por algunos mitos populares que hay sobre el embarazo y la maternidad. Algunos de los más conocidos son los siguientes:

• Mito 1. Debes comer por dos: Existe la creencia popular de que una mujer embarazada debe comer por dos. Este es un mito que es incluso perjudicial para la salud tanto del bebé como de la madre. Duplicar la ingesta calórica puede provocar un aumento excesivo de peso, lo que puede llegar a causar problemas más adelante en el embarazo.  Lo recomendable es que las mujeres consuman alrededor de 200 calorías adicionales al día y sobre todo desarrollar hábitos alimenticios saludables.
• Mito 2. La lactancia materna es algo natural: Algunas personas creen que las madres tienen un instinto que les surgirá de forma natural durante la lactancia y esto no siempre es cierto. Aunque los bebés nacen con el reflejo de buscar el pecho de su madre, es completamente normal que una mujer requiera de cierta orientación y apoyo para saber cómo debe amamantar a su hijo/a. Debes tener en cuenta que la lactancia materna requiere tanto de tiempo como de práctica, por lo que las madres no deben sentirse deprimidas o ‘inadecuadas’ si no saben muy bien cómo hacerlo correctamente.
• Mito 3. Todas las madres están felices después del parto: Obviamente, el parto y el embarazo se trata de una experiencia única e inolvidable. Pero esto no quiere decir que todo será pura felicidad. De hecho, es muy normal que existan muchos problemas y malos días durante estas etapas. Es muy normal que las mujeres experimenten muchos cambios hormonales durante y después del parto, por lo que es habitual que haya días donde no te sientas del todo cómoda o te invada la tristeza.
• Mito 4. La depresión posparto es rara y se resuelve por sí sola. En realidad, una de cada 10 madres acaba padeciendo de depresión posparto. Además, en muchos casos, estas mujeres pueden tardar hasta un año en recuperarse por completo.
• Mito 5. Las buenas madres sacrifican sus propias necesidades para cuidar a su bebé: Es completamente cierto que tener un bebé es muy exigente. Por lo tanto, tendrás menos tiempo para cuidarte y dedicártelo a ti misma. Pero esto no significa que debas sacrificarlo todo por tu hijo/a. Es decir, no es saludable ni para ti ni para el bebé descuidarte a ti misma. No es egoísta tomarte un tiempo tanto para comer, ducharte o simplemente descansar.

Estos son algunos mitos que pueden afectarte durante la maternidad. Debes tener en cuenta que no todas las cosas que se dicen sobre el embarazo y la maternidad son reales, por lo que debes coger con pinzas muchos de los comentarios que oirás durante todas estas etapas. La mejor decisión que puedes tener es priorizar tanto tu salud mental y física como la del bebé durante estas fases. Vivir la maternidad es una experiencia única, aunque también tiene sus dificultades.  

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