Workaholic: 7 Señales de que sufres de una adicción al trabajo
¿Estás siempre haciendo horas extra? ¿Crees que tu trabajo es equivalente al éxito que tienes en la vida? Quizá eres un workaholic y sufres de adicción al trabajo. Descúbrelo.
Muchas personas consideran a las personas más trabajadoras como un sinónimo de éxito y prosperidad en sus vidas. Pero, existe una diferencia entre trabajar muchas horas y tener una necesidad incontrolada de trabajar. Un workaholic sufre de una adicción al trabajo que le impide disfrutar tanto de su profesión como de su vida personal.
¿Qué es un workaholic?
Los workaholics o adictos al trabajo sufren de una necesidad incontrolable de trabajar sin cesar. Este término fue utilizado por primera vez durante el 1971 por el psicólogo Wayne Oates, quien empezó a ver un comportamiento compulsivo en algunas personas alrededor de sus tareas profesionales.
A pesar de que un workaholic es una patología que no está reconocido dentro del Manual de diagnóstico de los trastornos mentales, la realidad es que cada vez existen más casos en los que la adicción al trabajo causa sus efectos y estragos en las personas.
En estos casos, el adicto al trabajo desarrolla una condición compleja en la que existe una dependencia psicológica, emocional y social alrededor de la profesión o el puesto de empleo. Tanto es así que la persona empieza a olvidar todo lo que no esté relacionado con su trabajo.
La obsesión de los adictos al trabajo es tal que pueden llegar a prescindir de sus horas de sueño y de sus relaciones por tal de lograr unos objetivos más que ambiciosos para su puesto de trabajo.
¿Por qué ser workaholic no es sinónimo de éxito?
Aunque existe la creencia popular de que aquellos que más trabajan obtienen más éxito, la realidad es completamente lo contrario. Diversos estudios psicológicos han demostrado que aquellas personas que sufren de adicción al trabajo son menos productivas que los individuos que tienen una actitud más sana alrededor de su profesión.
Además según apuntan investigaciones al respecto de los workaholics, esta compulsión alrededor del trabajo puede suponer muchos estragos preocupantes en nuestra salud mental y física. De hecho, en Japón el problema se ha extendido tanto que una quinta parte de los trabajadores sufren de esta adicción al trabajo.
Un workaholic tiene muchas más probabilidades de sufrir problemas mentales como son la depresión, el trastorno obsesivo compulsivo, la ansiedad y por supuesto, sufrir una alta exposición al estrés.
Señales para detectar a un workaholic
En muchos casos la persona que sufre de esta condición de adicción al trabajo no suele ver que realmente tiene un problema. Por ello, es vital consultar con un psicólogo profesional si cumple muchos de los siguientes síntomas.
- Pensamientos obsesivos: Una de las primeras señales que indican que puedes ser un workaholic son los pensamientos obsesivos alrededor del trabajo. Esto implica estar pensando en tus tareas en tu tiempo libre o cuando estás pasando un rato junto a tus seres queridos. Cuando estos pensamientos alrededor del trabajo impiden que puedas descansar, es que puedes ser un ‘workalcoholic’.
- Dedicar más tiempo al trabajo: Todos hemos hecho alguna hora extra alguna que otra vez, pero cuando esto se repite en demasiadas ocasiones y se convierte en una rutina, esto puede ser una clara señal de alerta de que formamos parte de los workaholics.
- Usar el trabajo como fuente para tu autoestima: Cuando usas tu trabajo como una fuente para tener más o menos autoestima, esto puede indicar un problema de adicción al trabajo. Muchas personas tienen esta falsa creencia de que su autoestima depende en parte del éxito o del trabajo que tengan. Esto es un mito con el que debemos trabajar para no desarrollar un problema alrededor del trabajo.
- Trabajar para reducir la ansiedad, depresión o los sentimientos de culpa: Una persona que usa su trabajo para calmar su ansiedad u otros sentimientos relacionados con otras patologías mentales, es un claro caso de workalcoholic. En estos casos, es vital acudir a la consulta de un psicólogo profesional.
- Problemas en las relaciones: En el momento de que tus relaciones personales se ven influenciadas por el exceso de trabajo, es muy probable de que estés sufriendo de una adicción al trabajo. Muchos workaholics suelen dejar de lado sus vínculos emocionales para realizar más tareas alrededor de su profesión.
- Problemas de salud debidos al estrés: Las personas que sufren demasiado estrés suelen acabar sufriendo diferentes problemas vinculados con su salud física debido a esta patología mental. El estrés causa muchos estragos a nivel físico y mental.
- Desarrollar ‘tolerancia al trabajo’: En el momento que un workaholic se acostumbra a un ritmo de trabajo, suele requerir de más horas para compensar su adicción. Tanto es así que llega a sus límites físicos y deja atrás todo lo demás.
La mayoría de signos que identifican a un workaholic o a un adicto al trabajo suele compartir muchas características con otro tipo de adicciones. En el caso de que te veas reconocido en muchas de estas señales, es vital acudir a la consulta de un profesional de la salud mental.
¿Cómo dejar de ser un workaholic?
Es vital que el ‘workalcoholic’ o ‘workaholic’ trabaje profundamente en su interior para dejar atrás este problema en su conducta. Para ello, los psicólogos aconsejan las siguientes indicaciones.
- Establece una pauta horaria y cúmplela: El primer paso para dejar atrás la adicción al trabajo es precisamente dejando de trabajar tanto. Para ello, es vital establecer un horario asumible y sano y cumplirlo a rajatabla. A pesar de que esto sea un paso difícil, debes recordar que hay una manera más inteligente y productiva de trabajar que echar muchas horas. Debes deshacerte de la idea de que trabajar más sinónimo de más éxito.
- Programa compromisos después de tu jornada laboral: Para deshacerte de este hábito alrededor de una adicción al trabajo, puede ser una buena idea establecer compromisos sociales para dejar de lado tu jornada laboral. Queda junto a las personas más cercanas a ti para disfrutar y relajarte.
- Dedícate más tiempo a ti: Uno de los problemas que suelen afrontar las personas que son workaholics es precisamente que no pasan suficiente tiempo con ellas mismas. Por este motivo, intentan afrontar y olvidar sus problemas personales a través de la adicción al trabajo.
En muchas ocasiones un workaholic suele sufrir de esta adicción debido a que tiene otros problemas de salud mental que no sabe solucionar. Debido a ello, es importante que consultes a un psicólogo profesional. No vives para trabajar, tu vida va mucho más allá de tu profesión.
Las informaciones publicadas por MundoPsicologos no sustituyen en ningún caso la relación entre el paciente y su psicólogo. MundoPsicologos no hace la apología de ningún tratamiento específico, producto comercial o servicio.
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD