Sometimiento Emocional
Todos nos hemos sentido sometidos a una relación emocional que sentíamos que nos superaba... Si te interesa, lee este articulo.
Siguiendo a H. Bleichmar entendemos por "sometimiento" un conflicto generalizable a todo sujeto en tanto a tal. Queremos decir con esto, que cada persona en su propia vida tendrá diferentes episodios dentro de las relaciones personales en los que se verá como sometido o sometidor. Para algunos, el estar en uno de estos dos roles será una contante, para otros quizá sólo sea vivido una vez…pero la dinámica de fondo establecida en el vínculo, opinamos que es entendida por todos los sujetos ya que es una forma de hacer propia del hombre.
¿Cómo nos afecta el sometimiento emocional?
Tendemos a colocarnos en relaciones de poder respecto a un otro trascendente. Nuestra naturaleza es social y necesita por tanto, de la intersubjetividad para adentrarse en el proceso de individualización. Siempre que hay relación con un otro, hay una mirada ajena ante la cual nos colocamos como objeto que es mirado, quedando así irreductiblemente marcados en nuestra propia naturaleza subjetiva.
"Con el término sumisión me refiero a una gama muy amplia de fenómenos, no sólo a los casos más extremos en que alguien es dominado totalmente por el otro/a, aceptando sus deseos, sino a algo mucho más frecuente, cotidiano: sino a algo mucho más frecuente, cotidiano: la angustia que experimentamos frente al otro/a, a la inhibición en expresarnos, a la mirada atenta con temor a los gestos del otro/a, a lo que dice, a su tono de voz, a su cara. El otro es escudriñado inconscientemente de manera constante para ver si está conforme/satisfecho con nosotros. Sumisión al otro/a es lo que impide dejar fluir lo que somos, lo que deseamos, lo que pensamos, lo que sentimos".
Bleichmar
Existen relaciones de pareja que se ven atrapadas por los efectos perniciosos de esta dependencia; uno de los cónyuges puede pasar años esperando un cambio en su situación de sometimiento y dolor agarrándose a su mecanismo neurótico. Puede darse una fabulación en el sometido en la que se sueña que la pareja-sometidor cambiará y resarcirá todo el daño hecho, futuro en el que dará por fin aquello que cree que merece, que será al fin y al cabo, como desea que sea. Y aunque la realidad contradiga una y otra vez tal fabulación, la relación continúa sin cambio año tras año. La felicidad propia queda relegada en pos de una relación infructuosa y sufriente.
"¿Por qué alguien queda fijado a otra persona y busca desesperadamente su amor, observa los más mínimos movimientos de su amado/a para detectar, minuto a minuto, el "parte meteorológico" del estado del otro, se llena de dolor si el otro/a no busca el contacto emocional o físico con la misma asiduidad que él o ella lo hace?"
Invitamos a la lectura del texto íntegro de Bleichamar para comprender la etiología de tales patrones de actuación de impronta temprana; tanto el sometido como del sometidor responden a una serie de condicionantes que se presentaron en su infancia y que incorporaron sin posibilidad de elección.
Todos en nuestra propia persona tenemos algo de cada uno de estos personajes. Dicho texto puede servir para vislumbrar tales roles inconscientes. A la luz de la comprensión cesa el desencadenamiento compulsivo.
Las informaciones publicadas por MundoPsicologos no sustituyen en ningún caso la relación entre el paciente y su psicólogo. MundoPsicologos no hace la apología de ningún tratamiento específico, producto comercial o servicio.
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