Ciberbullying: Claves para identificar y prevenir los 6 tipos de ciberacoso

Existe un lado oscuro entre todos los beneficios que nos ha aportado el internet. El ciberbullying, también conocido como ciberacoso, es un problema que cada día afecta a un mayor número de personas, sobre todo a los más jóvenes. Antes los acosadores tenían un lugar, podía ser el colegio o las calles, pero ahora, el acoso en internet llega a todos los sitios. 

Cada vez aumentan más los casos de ciberacoso y no solo en número sino también en su gravedad. De hecho, algunas investigaciones han concluido que el ciberacoso puede afectar hasta el 60% de la población adolescente. Las personas que se ven afectadas por el ciberbullying pueden experimentar muchos prejuicios psicológicos incluyendo conductas suicidas. Por ello, es importante detectarlo a tiempo. 

¿Qué es el ciberbullying?

El ciberacoso o ciberbullying hace referencia al uso del internet para causar daños a otras personas. Normalmente esto involucra el uso de medios como las redes sociales para intentar alcanzar a la víctima y causarle un daño en su imagen. 

Se considera que estamos ante casos de ciberbullying cuando este acoso se produce de forma repetida e intencional y cuando incluye a dos personas menores de edad. Además normalmente estos ataques suelen darse a través de amenazas, violencia verbal y humillación pública. 

Tipos de ciberbullying

Existen muchos tipos de ciberacoso en la actualidad. De hecho, cuanto más proliferan las redes y más influencia tienen, más formas de violencia aparecen a través de ellas. Actualmente podemos identificar las siguientes:

1. Flaming: El flaming hace referencia al uso de mensajes ofensivos para intentar captar la atención de una persona y provocar una reacción que le pueda perjudicar. En estos casos de ciberacoso, la persona atacada puede quedar como si no fuera la víctima delante de las personas anónimas. 
2. Outting: Estos tipos de ciberbullying implican compartir la información privada o vergonzosa de una persona a través del internet y sobre todo en las redes sociales. 
3. Trolling: Otra de las formas de acoso por internet implica la búsqueda de intentar irritar y ofender a la gente en general. De este modo, la persona ciberacosadora dirá algo despectivo y ofensivo para provocar una reacciones de los internautas.
4. Apodos: En algunos casos, las personas realizan ciberbullying sin que los demás puedan percibirlo. De hecho, solo lo saben los acosadores y la víctima. El uso de apodos consiste en llamar de una forma concreta a alguien y empezar a acosarle sin que los otros lo perciban. 
5. Hostigamiento: En este caso, la víctima recibe mensajes de forma reiterada que son ofensivos y/o agresivos. Éste se diferencia del flaming y de los apodos porque en este caso, el hostigamiento se produce durante un período largo en el tiempo y la agresión se caracteriza por ser más unilateral, es decir, incluye a una o más personas agresoras contra una víctima específica. 
6. Difusión de rumores falsos o denigración: Se han dado muchos casos reales de ciberbullying donde los acosadores difundían rumores vergonzosos y falsos sobre una víctima que perjudicaban su nombre en las redes y en la realidad. Este tipo de ciberacoso es uno de los más frecuentes junto al flaming y al hostigamiento. 
7. Acoso cibernético: A veces los acosadores no se limitan a ofender a la víctima. Tanto es así que existen casos en que el ciberbullying acaba con palabras de amenaza física muy graves.
8. Exclusión: Este tipo de ciberacoso se caracteriza por no dejar participar a una persona de forma reiterada en una red social específica. 
9. Suplantación: La suplantación se da cuando el agresor/a accede a cuentas de la víctima para hacerse pasar por ella y enviar mensajes agresivos a otras personas como si hubiese sido la propia víctima. 
10. Paliza feliz o happy slapping: La paliza feliz o happy slapping es un término que se utiliza para referirse a la grabación de abusos físicos que se producen entre compañeros y que posteriormente se sube a las redes sociales. 

Consecuencias del ciberbullying

Existen muchos estragos de sufrir el acoso por internet. En ciertos casos, el ciberbullying puede tener más efectos que el 'acoso tradicional' debido a que la persona que lo recibe no puede escapar de esta situación ya que todo queda en la 'nube' y la víctima ya no está a salvo en la intimidad de su casa, sino que recibe acoso continuo y es inevitable. Según las investigaciones al respecto, las personas que se ven como víctimas en un caso de ciberacoso, pueden experimentar las siguientes consecuencias para su salud mental. 

• Sentimientos de angustia por el acoso
• Aumento de la sensación de depresión y cambios de humor.
• Ansiedad y ataques de pánico
• Problemas para conciliar el sueño o permanecer dormido
• Ideación suicida o intento de suicidio
• Aumento de los sentimientos de miedo
• Sentimientos de baja autoestima
• Aislamiento social
• Bajo rendimiento académico
• Problemas en las relaciones con familiares y amigos
• Síntomas del estrés postraumático
• Autolesiones
• Abuso de sustancias
• Aumento de los sentimientos de ira, irritabilidad o arrebatos de ira

Como vemos los síntomas del ciberbullying pueden ser muy perjudiciales para una persona y las consecuencias no sólo afectan a las víctimas, sino que también a los agresores y a las personas que lo presencian. Además normalmente el acoso en internet suele darse en edades muy tempranas, donde la influencia social es mucho mayor. Por ello, si detectas que alguien está sufriendo de ciberacoso, es importante comunicárselo a un adulto o recomendar la consulta de un psicólogo profesional. 

¿En qué se diferencia el bullying y el ciberbullying?

En el caso del ciberacoso, la víctima suele verse sin ninguna escapatoria ante los abusos. La razón de ello es que a diferencia del bullying 'tradicional', el acoso en internet está en cualquier lugar y situación. De hecho, las pruebas de estos ataques permanecen en el tiempo de una manera material y por lo tanto, la víctima se siente constantemente acosada. 

¿Cómo prevenir el ciberbullying o ayudar a las víctimas?

La mejor manera de abordar los diferentes tipos de ciberacoso es mediante la comunicación y la muestra de confianza de los adultos que están a su alrededor. Para ello te recomendamos las siguientes pautas a seguir:

1. Escucha y dialoga: muéstrate sereno y con una actitud de comprensión y atención. Es normal que las personas que sufran de un acoso por internet sientan vergüenza de ello, por lo tanto es importante intentar no juzgar ninguna de sus acciones y ser todo oídos para que la víctima se sienta en confianza. 
2. Refuerza su autoestima y no le culpabilices: haz hincapié en que no está solo, que estás allí para ayudarle a resolver la situación. Refuerza su valentía por haber pedido ayuda. Es muy difícil para cualquier persona asumir que está siendo acosado y pedir ayuda en los casos de ciberacoso. 
3. Actúa inmediatamente: no esperes a que el acoso cese por sí solo porque el problema podría agravarse. La clave es hablar los acosadores intentar solucionarlo de la forma más madura posible.
4. Comunica la situación al colegio: normalmente el ciberbullying no solo se limita al mundo virtual. De hecho, las víctimas suelen recibir estos ataques por partida doble: tanto en el colegio como en casa a través del internet. 
5. Aconséjale sobre cómo actuar:
   • Mantener la información sensible en privado
   • Ayudarle a frenar el ciberacoso
   • Si se siente amenazado es hora de buscar ayuda
   • Animarle a hacer amigos
   • Bloquea al acosador y denuncia los contenidos abusivos
   • Guardar las pruebas
   • Fomentar la empatía
6. Busca ayuda de expertos: como hemos la mayoría de los casos de ciberbullying suelen acabar con muchas consecuencias psicológicas para la víctima. Por ello, si tu hijo/a ha recibido esta clase de abusos es importante realizar una consulta junto a un profesional de la salud (también existen consultas de psicología en la seguridad social).
7. Asegúrate que el menor se siente cómodo solicitando tu ayuda: nunca le avergüences por las acusaciones o los actos que ha hecho. Sé comprensible e intenta ser lo más respetuoso posible ante la situación. 

El ciberbullying va mucho más allá del acoso tradicional. En muchos casos de ciberacoso las cosas se van de las manos, ya que los adolescentes piensan que en internet todo vale. No permitas que nadie te humille o te ataque de esta forma y actúa para acabar con ello.

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