El coste de ser un amor prohibido
Le entregas todo de ti, porque piensas que es la persona de tu vida. Pero, sigues siendo la amante. ¿Te merece la pena?
El concepto de “amante” puede entenderse a través de dos puntos de vista. En el primer caso, el amante es aquella persona que solo busca una relación sexual y pasional en su vida con la que disfrutar. En el segundo caso, nos debemos referir al amante en un matrimonio. Entendiendo, aquella relación de amor, sexo, cariño y pasión con el obstáculo de que la persona que has escogido para compartir tu amor ya está casada con otra. Este tipo de amante o coloquialmente conocida como “la otra” o “el otro”, se suele llevar de forma discreta y clandestina para los amigos y familiares. Puesto que supone un alto coste para el hombre o mujer que se encuentra casado. Si embargo, puede que el mayor coste de la relación sentimental perjudica a la autoestima o crecimiento personal de la amante.
Tu autoestima y amor propio
Generalmente, el perfil de ser amante solemos encontrarlo en mujeres y no en hombres. Según los datos de la encuesta de Phiero, el pasado año el 81% de los hombres aseguraron haber sido infieles, en el caso de las mujeres el porcentaje bajaba a un 53%. La realidad, es que a diferencia de los hombres, las mujeres que se encuentran en el papel de amantes de un hombre casado suelen ser más intensas y se centran en la relación. Incluso siendo conscientes que se encuentran en una relación que viene y que va para que la mujer de él no se entere de su affair, las amantes llegan a desconectarse de sus seres queridos apostando todo a esa relación prohibida. En muchas ocasiones, “la otra” suele frustarse cuando está enamorada porque el hombre no se separa a pesar de que lo prometa cientos de veces. Ellas suelen terminar acudiendo a terapia argumentando que se sienten perdidas e infravaloradas.
¿Madre, niña y amante?
A raíz de las terapias realizadas con mujeres inmersas en una affair con una persona casada, las terapias sistémicas, dedujeron que muchas mujeres adquieren el papel de la mamá, a causa de la mala relación de pareja entre el hombre y su mujer. La realidad es que, el hombre casado tiene obligaciones con su mujer y sus hijos, y las inseguridades en la amante se volverán más presentes. Pasando por situaciones de celos al ver que pasa más tiempo con ellos que contigo o incluso sintiéndote como el segundo plato siempre. Siguiendo por la desconfianza, siendo consciente de que igual que tu relación es un secreto podría haber otras. O incluso, en el caso de que definitivamente dejase a su familia por ti, podría volver a ocurrir porque él ya ha tenido un affair contigo y podría repetir el patrón. Al final, buscar un papel será tu mejor baza dentro de un triángulo amoroso en el que se encuentran: la traición hacia la otra persona y el dolor que estás sintiendo por ser un secreto.
Los papeles deducidos a través de las terapias sistémicas se diferenciaron de dos maneras e incluso pueden darse en una misma relación prohibida:
1. La mujer fuerte
Ubicamos el papel de la “madre” en la relación sentimental. La mujer suele ser la madura de la relación y la que se hace cargo de un hombre inmaduro, inseguro, infiel y perdido. Es ella quien dirige la relación a pesar de que su pareja esté casada.
2. La niña
En este caso, encontramos a un tipo de mujer muy diferente, pus suele ser caprichosa, creída e incluso superficial en muchos aspectos. Buscan hombres que las consientan y las trate como una reina.
Las relaciones de pareja son complicadas y más cuando el daño emocional de cada una de las partes implicadas está tan presente. Ver a la otra persona como un cobarde y querer más, sentirte egoísta por querer a alguien y no poder expresarlo, sola por haber evadido a las personas de tu alrededor por centrarte en tu affair sin llegar a un punto en común en el que se vea la luz de salida del túnel. Las relaciones no son una película cinematográfica que nos brinda una visión distorsionada de un final feliz entre un hombre infiel y su amante. El mundo real es muy distinto, y muchas veces permitirnos una pausa para pensar y ver más allá de lo que tenemos es positivo para darnos cuenta de la realidad y de que siendo realistas, son muy pocas las personas que se terminan divorciando para estar con la amante ante una situación de infidelidad. Podrán ser más o menos felices, pero en la gran mayoría de ocasiones los infeles sienten que han podido recobrar una ilusión que habían perdido con su mujer.
En ese caso, debemos sernos sinceras y darnos cuenta lo que nos está costando ese tipo de relación, porque aunque intentemos no pensar en lo que podrá sentir la tercera persona, nuestra integridad como personas y autenticidad se están viendo corrompidos. Nos está perjudicando psicológicamente, afectando a nuestro sistema nervioso y a nuestros sentimientos. Una relación de amor sana debería ser gratificante, comprometida, comprendida, alegre, sana y pasional. El amor no debería ser una compañía porque no sabemos estar solos o carga que nos proporciona sufrimiento a largo plazo. La alegría es uno de los pilares que sustentan el amor y de la felicidad del ser humano. ¿Lo es la tuya?
Las informaciones publicadas por MundoPsicologos no sustituyen en ningún caso la relación entre el paciente y su psicólogo. MundoPsicologos no hace la apología de ningún tratamiento específico, producto comercial o servicio.
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Yo voy a ser claro y directo,la amante además de no ser honesta,de no tener amor propio y de no ser solidaria con su genero sufre por un hombre que no vale la pena,mi lema esta muy claro,no le hagas a los demás lo que no te gustaría que te hicieran ,por mucho que me atraiga una persona, si esta en pareja me alejo,cuando no esté,entonces si y no me vale justificaciones como "es que los niños.....es que el no es feliz con ella....excusas y solo excusas pues si no es feliz no viviría años debajo del mismo techo ni se apostaría con ella.valorense amantes.