Amores insanos
¿Cuántas personas conocemos enganchadas a relaciones insanas e incapaces de desligarse de ellas porque no pueden o no quieren?
El miedo a perder la fuente de seguridad y bienestar que nos genera la pareja las mantiene atadas a una tortura que con el tiempo se convierte en costumbre y la persona va perdiendo poco a poco su "esencia" o "naturalidad", su forma de ser… evitando enfrentar los miedos y cayendo en un círculo vicioso del cual cada vez resulta más difícil salir.
No importa el tipo de vínculo que tengas, si realmente quieres liberarte de esa relación que no te deja ser feliz ¡puedes! No será un camino fácil pero con algo de ayuda nada es imposible. El comienzo: cambiar las viejas costumbres y limpiar tu manera de procesar la información, detectando los autoengaños y siendo más sincero contigo mismo. Si aprendes a ser realista en el amor, si te autorrespetas y desarrollas tolerancia y autocontrol, habrás iniciado tu camino a la felicidad.
Siguiendo el autor Walter Riso vamos a plantear varios principios que te ayudarán a detectar si estas dentro de una relación insana y caminar hacia el tipo de relación que tú quieras. Lo primero es aprender a ser realista, esto significa ver la relación de pareja tal cual es, sin distorsiones ni autoengaños. Se puede lograr una relación afectiva y psicológicamente sana pero habrá que aprender a soltar y no sujetar a la persona que se dice amar, no sesgar, negar, justificar, olvidar, idealizar, minimizar o exagerar, contarnos mentiras y cultivar falsas ilusiones para alimentar la imagen romántica de nuestro sueño amoroso o lo que "nos gustaría que fuera", comprendiendo la relación en el momento presente, para poder tomar las decisiones acertadas y generar soluciones o comenzar a despegarnos si así tiene que ser.
Algunas de las distorsiones cognitivas más comunes según W. Riso que impiden alcanzar ese realismo son tratar de excusar el poco amor recibido; minimizar los defectos de la pareja; creer que todavía hay amor donde no lo hay o persistir tozudamente en recuperar un amor perdido y alejarse, pero no del todo. Veamos algunas de ellas.
Excusar el poco amor recibido
Es duro aceptar que no nos quieren con todas las fuerzas. Cuando la persona que amamos nos quiere a medias, con dudas y limitaciones la sensación que queda es más de agradecimiento que de alegría, como si estuvieran haciéndonos un favor. Sanear una relación implica correr el riesgo de que ésta se acabe, ya que si existen dudas, dejarlo como está solo hará que el amor se rompa.
Frases típicas para detectar si estamos "excusando" pueden ser:
- "Me quiere pero no se da cuenta". Cuando una persona está enamorada lo sabe, lo siente, no pasa desapercibido porque su cuerpo se encarga de avisarle. Si alguien no sabe que te quiere, no te quiere.
- "Los problemas que tiene le impiden amarme". La mayoría de las personas dependientes que no se sienten amadas tienden a justificar el desamor de su pareja mediante causas psicológicaso traumas pasados. Es cierto que pueden afectar, sin embargo la pérdida del amor llega por desgaste, si el afecto se descuida puede desaparecer, aunque pueda resultar doloroso es posible que la causa del desamor no sea más que desamor.
- "Esa es su manera de amar". Si la "manera de amar" de tu pareja incluye antipatía, indiferencia, egoísmo e infidelidad, cuestiona la relación.
- "Me quiere, pero tiene impedimentos externos". Trabajo excesivo, cansancio, estrés… cualquier excusa es buena para justificar la distancia afectiva. Los problemas de la vida diaria pueden alterar y destemplar un poco el amor, pero no lo eliminan. Si solamente te aman cuando no hay problemas ponte en alerta.
- "Se va a separar". Muchas veces si nos dicen "no puedo separarme aún" significa en realidad "no tengo el coraje de hacerlo". Si llevas tiempo esperando a que se separe y no lo hace, es que no te ama como te mereces, ya que si lo hiciera ya estaría contigo.
Minimizar los defectos de la pareja o la relación
Las personas apegadas tienden a reducir los defectos de su pareja al mínimo, para hacer más llevadera la relación y disminuir los riesgos de ruptura.
Las frases típicas suelen ser:
"Nadie es perfecto", "hay parejas peores". Este argumento resta el valor de cualquier defecto porque siempre es posible encontrar a alguien en peor estado. Las personas con este argumento suelen tener una baja autoestima y ser dependientes e inseguras.
"No es tan grave". Minimizar las consecuencias no te ayudará a ser realista, estarás eliminando tus sueños y deseos personales. La flexibilidad es buena siempre y cuando no se lleve por delante los valores de la propia persona.
"No recuerdo que haya habido nada malo" "mi vida de pareja es perfecta". Esta es una distorsión cognitiva que consiste en olvidar o minimizar los problemas y maximizar las buenas cosas de la relación. No se trata de ir a los extremos y odiar o buscar venganzas sino de ver hasta qué punto se justifica seguir invirtiendo tu energía positiva a un amor que está en decadencia.
La mente utiliza los autoengaños para intentar salvar el amor extraviado. No importa como de dañino sea, nos "cegamos" y nos dejamos guiar por los miedos volviéndonos inseguros. En otro artículo hablaremos de otras de las distorsiones cognitivas que solemos encontrarnos en un amor insano, no resignarnos a la pérdida y seguir aprendiendo a detectar éstas distorsiones y sanear nuestras relaciones siendo más realistas.
Las informaciones publicadas por MundoPsicologos no sustituyen en ningún caso la relación entre el paciente y su psicólogo. MundoPsicologos no hace la apología de ningún tratamiento específico, producto comercial o servicio.
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
Esto es así, mi marido no acepta que se haya acabado el amor e intenta recuperar algo que ya no existe de esta forma.