La importancia de la familia en la educación y en la salud mental

La familia tiene un papel muy relevante tanto en la educación como en la salud mental de los niños. Es por este motivo que debemos tener en cuenta la importancia que tiene la familia durante los primeros años de vida. La familia y la educación debe acompañar a los niños para que puedan desarrollarse de la mejor forma posible. Pero, ¿Cómo podemos mejorar nuestras relaciones familiares?

¿Por qué tiene tanta importancia la familia en la educación de los niños? 

Tener una buena relación familiar no solo nos permite tener un buen ambiente en nuestro hogar. Sino que además permite que los pequeños puedan desarrollar mejor todas sus capacidades psicológicas. Esto sucede ya que tener un buen vínculo familiar tiene las siguientes ventajas. 

1. Mejora la salud mental

La interacción con una red social cercana, reduce singnificativamente los problemas de salud mental que pueden padecer los niños. Tanto es así que en muchas ocasiones, la familia y la educación son la clave para que los niños no sufran una mala salud mental. 

2. Mejor desempeño escolar

Tener un buen ambiente en el hogar favorece la relación entre la familia y la escuela, haciendo que los niños puedan sacar más provecho de las clases que tienen en el colegio. Gracias a la colaboración de la familia, los niños mejoran mucho más que sin la presencia de los padres. 

3. Reduce el riesgo de problemas de conducta

En muchos casos, tener una buena relación entre la familia y la escuela hace que se reduzcan significativamente los problemas de conducta que pueden tener los niños. De este modo, es crucial la importancia de la familia cuando existen problemas en el comportamiento de los hijos. 

4. Aumenta la confianza de los niños

Pasar tiempo con la familia también hace que aumente la confianza personal de cada uno de sus miembros. Por este motivo, el papel de la familia en la educación es fundamental para el buen desarrollo de un equilibrio emocional y mental. 

5. Promueve la adaptabilidad y la resiliencia

La resiliencia es la capacidad de afrontar los cambios de la mejor forma. Por este motivo, tienen mucha importancia la familia en el desarrollo psicológico de los niños. Poder ser resistentes a los errores y no temer al fracaso es una de las capacidades que hará que los niños puedan convertirse en su mejor versión. 

Estas son algunas de las ventajas que nos ofrece tener una buena relación entre la familia y la escuela. De esta forma, es vital que la familia tome un papel muy relevante en la educación de los más pequeños. 

¿Cómo mejorar nuestro tiempo en familia?

Para que la familia y la educación sean lo mejor posibles para el desarrollo del pequeño o pequeña, la clave es intentar mejorar nuestro tiempo dentro del vínculo familiar. Para ello podemos tener en cuenta lo siguiente.

1. Tiempo familiar versus tiempo laboral

Es necesario aumentar el tiempo en familia, actualmente es escaso y se encuentra en desventaja respecto al tiempo laboral. Crear en la familia un espacio y tiempo de interacción es una premisa básica para mejorar la dinámica familiar. Ser familia significa más que compartir techo, significa interacción, preocupación por el otro, compartir… etc.

2. Tiempo en familia de calidad versus tiempo en familia en cantidad

Actualmente, el tiempo en familia de calidad se ve amenazado. Surgen nuevos tipos disfuncionales de sistemas familiares, por ejemplo, la familia mediática donde cada miembro dela familia disfruta de su tiempo libre absorto en uno mismo (uno con los videojuegos, otro con internet, viendo la televisión, escuchando música…) sin «compartir» con el resto. Se convive en un espacio físico pero no existe verdadera interacción. Debe primar la calidad sobre la cantidad. La calidad en el tiempo familiar se circunscribe a la apertura de los miembros, la atención hacia el otro, la actitud positiva… Sentirse a gusto disfrutando al compartir la vida familiar es la clave.

3. Fomento de la comunicación familiar

La comunicación escasa y disfuncional es el principal problema de las familias y de las parejas, por ello, es necesario enfatizar la necesidad de trabajar las habilidades de comunicación en familia. Hoy en día siguen existiendo determinados temas tabú que no se tratan en familia (sexualidad) que no se tratan en común y se crean lagunas y falta de confianza en la nueva generación. Con un estilo comunicativo eficaz es más fácil abordar los temas más escabrosos.

4. Darse el permiso para hablar de cualquier tema dentro del núcleo familiar

Esta pauta es consecuencia de la anterior. Es necesario saber comunicarse de un modo funcional y no ofensivo, pero además desde el subsistema parental, se debe primar la necesidad y beneficio de practicar una comunicación eficaz. Así es como los hijos van interiorizando los valores y las normas aumentado su autoestima y formado su autodeterminación en pro de una responsabilidad y madurez integral de los hijos para fomentar la socialización.

5. Promover la madurez y la responsabilidad de los hijos

Otro de los grandes escollos de la sociedad actual es la infantilización de las nuevas generaciones. Existe una ausencia o déficit en la capacidad madurativa de la persona, nos encontramos con «eternos adolescentes» que viven en «burbujas» bajo la sobreprotección delos padres. En este punto destacaría la necesidad de que los padres vayan delegando responsabilidad en los hijos en función de su capacidad y edad. Esta responsabilidad hace madurar a los hijos y se debe premiar con un aumento en la autonomía proporcional.

Como conclusión la sociedad, la familia y la escuela se retroalimentan mutuamente y los cambios en una esfera influyen en las modificaciones de las otras. La educación es un aspecto a trabajar desde diferentes focos para lograr una educación integral de la persona y unos mejores resultados.

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